El beisbol mexicano no se puede jugar a puerta cerrada. Horacio de la Vega, presidente de la LMB, afirmó que los equipos ven insostenible esa idea.
“Más del 60 por ciento y en algunos casos el 70 de los ingresos de los equipos provienen de la taquilla y las compras de los aficionados en los estadios, es algo que queremos mantener”, explicó a De la Vega.
De la Vega comentó que aunque no es prudente realizar la campaña sin aficionados, eso no quiere decir que no contemplen alternativas para hacer rentable la Liga sin público.
Además, se reúne con las autoridades de salud y en última plática le explicaron que podrían iniciar en julio para reactivar la economía.
“Si esto sucede, podríamos abrir una convocatoria para iniciar pretemporada en el mes de julio y arrancar en el mismo julio o agosto, eso dependerá de cómo evolucione la pandemia”, agregó.
Al momento, la LMB considera un calendario de 50 o 51 juegos como mínimo, más un Juego de Estrellas, y tienen hasta agosto para iniciar la campaña, en septiembre ya no sería apropiado. “Ya no estamos pensando en ganar nuevos recursos sino en salir lo mejor librados”, reconoció.
De los más de cinco grandes patrocinadores del béisbol mexicano, dos de ellos han pedido no participar en esta campaña, a pesar de ello los 16 equipos mantienen sus intenciones de jugar en 2020.
Entre los planes no está llevar a cabo la temporada en una sola ciudad, pero sí jugar en estadios sin su máxima de capacidad para mantener la distancia en caso de que las autoridades de salud así lo recomienden.