El presidente Andrés Manuel López Obrador calificó este lunes como un “despropósito” y una “desfachatez” la denuncia interpuesta en Ecuador contra el diplomático Roberto Canseco por presunta obstrucción de la justicia al intentar evitar el asalto a la embajada de México en Quito el 5 de abril.
“No pues es un despropósito (la denuncia), es un acto de prepotencia supina, una desfachatez”, aseveró el mandatario durante su conferencia de prensa matutina.
El gobernante mexicano se refirió así a la denuncia interpuesta en Ecuador contra Canseco, la cual fue recibida por la Fiscalía General de Ecuador el pasado 25 de abril, en la que se le acusa al diplomático de obstrucción de la Justicia.
Las autoridades ecuatorianas señalan a Canseco por intentar evitar el asalto a la Embajada de México en Quito y la posterior detención de Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Corral (2013-2017), al que el Gobierno de López Obrador había otorgado asilo.
“¿Cómo un servidor público, un diplomático de nuestro país, que actúa con dignidad, que es un orgullo para la política exterior de nuestro país en defensa del derecho de asilo, cómo va a ser denunciado por los invasores, por los que violan el derecho internacional, el derecho de asilo, nuestra soberanía?”, cuestionó López Obrador.
Asimismo, expresó “todo nuestro apoyo” para el diplomático y para toda la misión de México en Ecuador, al tiempo que pidió a los senadores mexicanos darles una distinción como la medalla Belisario Domínguez, uno de los máximos reconocimientos para un ciudadano.
“Nosotros los vamos a reconocer, a toda la misión, y de manera especial a este servidor público, Roberto Canseco, de veras es un ejemplo a seguir, no sólo en el servicio exterior mexicano, sino en todo lo que tiene que ver con todos los servidores públicos de nuestro país”, dijo.
La crítica de López Obrador se da apenas unos minutos antes de que el Gobierno de Ecuador contrademandara a México ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de la Haya al considerar que el Estado mexicano contravino el convenio que regula el asilo diplomático cuando otorgó este beneficio a Jorge Glas.
La polémica entre ambos empezó tras el allanamiento de la Policía en la Embajada de México el 5 de abril para llevarse al exvicepresidente Jorge Glas, resguardado ahí desde diciembre ante un proceso de corrupción.
Y ha crecido porque un tribunal de Ecuador declaró el 12 de abril la detención de Glas dentro de la sede diplomática de México como ilegal y arbitraria, aunque quedó encarcelado al tener pendiente de purgar la condena por el caso Sobornos y por asociación ilícita en el caso Odebrecht.
El pasado 15 de abril, Glas envió una carta a López Obrador en la que pide ayuda y asegura “está en la peor prisión de Ecuador” y que se encuentra en “huelga de hambre”.
Información de EFE