LA HAYA, Países Bajos.– El gobierno holandés recomendó este martes que los menores de 15 años no utilicen plataformas de redes sociales como TikTok e Instagram, debido a los efectos psicológicos y físicos negativos que se han identificado entre los menores usuarios, incluyendo ataques de pánico, depresión y trastornos del sueño.
El Ministerio de Salud también sugirió a los padres restringir el tiempo que sus hijos pasan frente a pantallas, evitar que usen teléfonos móviles o computadoras portátiles en los dormitorios y establecer rutinas que incluyan 20 minutos de uso de dispositivos seguidos de dos horas de juego al aire libre.
Vincent Karremans, viceministro interino de Juventud y Deporte, declaró en una carta enviada al Parlamento que estas pautas buscan “dar a los niños el tiempo para desarrollar aún más la resiliencia digital y la alfabetización mediática”.
Karremans continúa en funciones tras la disolución del gobierno a principios de mes, en espera de elecciones previstas para octubre.
Aunque TikTok e Instagram establecen un mínimo de 13 años para sus usuarios, las nuevas directrices holandesas no son legalmente obligatorias.
Sin embargo, hacen una distinción entre redes sociales, con funciones consideradas “significativamente más adictivas”, y plataformas de mensajería como WhatsApp y Signal, las cuales pueden utilizarse a partir de los 13 años, coincidiendo con el inicio de la educación secundaria en Países Bajos.
Estas medidas se suman a una tendencia internacional: Australia prohibió en 2023 el uso de redes sociales a menores de 16 años, mientras que Dinamarca y Francia evalúan legislaciones similares.
Suecia también emitió recomendaciones para limitar el tiempo frente a pantallas en niños.
En Holanda, un grupo de expertos convocado por el Parlamento concluyó que el uso excesivo de pantallas y redes sociales puede causar efectos adversos en la salud mental y física de los menores.
Por esta razón, las escuelas han prohibido el uso de tabletas, teléfonos móviles y relojes inteligentes, salvo en actividades específicas como clases de alfabetización mediática.
En mayo, alrededor de mil 400 médicos y especialistas en bienestar infantil firmaron una carta pública en la que pidieron prohibir el uso de teléfonos móviles a menores de 14 años y restringir el acceso a redes sociales hasta los 16.
La preocupación sobre los efectos del uso prolongado de dispositivos también ha alcanzado a la familia real.
En febrero, la reina de los Países Bajos reveló que su hija menor, la princesa Ariane, había desarrollado problemas de visión por pasar demasiado tiempo frente a pantallas.