Ciudad de México (SinEmbargo).– José Artemio Zúñiga, Juez del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, otorgó la mañana de este miércoles una prórroga de 30 días a Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), para que pueda recabar y presentar pruebas a su favor sobre la investigación del caso Odebrecht.
Aunque la defensa del exfuncionario había solicitado un plazo de 60 días para el cierre de investigación complementaria, el juzgador sólo autorizó un mes, por lo que tiene hasta el próximo 3 de diciembre para presentar la información que logre juntar. La decisión del Juez se basó en los derechos a la defensa y debido proceso
Durante la audiencia, la Fiscalía General de la República (FGR) manifestó su oposición a la petición de la prórroga y aprovechó para hacer un llamado a que se declarara “cerrada la etapa de investigación complementaria, puesto que los documentos que alude la defensa para solicitar el plazo adicional, ya se encuentran en la carpeta de investigación”.
De acuerdo con el Consejo de la Judicatura Federal (CJF), Pemex y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) se sumaron a la pretensión de la FGR. “Asimismo, insta a la Fiscalía a que agote los medios para obtener ese dato de investigación (Convenio No. 5)”, informó.
Fue cerca de las 9:08 horas de hoy que el exfuncionario arribó a bordo de una camioneta negra con vidrios polarizados a las instalaciones del centro penitenciario, donde ya lo esperaban diversos medios de comunicación para captar una imagen de su llegada.
“Licenciado, el vehículo no va a poder ingresar. Van a ingresar a pie”, dijo una persona de la entrada a uno de los abogados de Lozoya Austin, por lo que éste tuvo que descender del automóvil y caminar entre los empujones de reporteros.
El exfuncionario descendió del vehículo y se dirigió hacia el interior del reclusorio junto con sus abogados. Uno de ellos, Miguel Ontiveros, señaló que al final de la audiencia darán declaraciones a los medios de comunicación.
Emilio Lozoya entró al Reclusorio Norte sin decir una palabra. Porta un traje gris y un cubrebocas blanco.
Esta es la primera vez que pisa una sala de audiencias y un reclusorio desde que llegó extraditado de España en julio de 2020.
En la audiencia de este día, el Juez deberá resolver si le concede los otros dos meses que solicitó para presentar pruebas en su defensa, si le da menos tiempo o si le niega la petición.
En caso de negársele la ampliación, tendrá que presentar las pruebas que tiene en contra de funcionarios de la administración de Enrique Peña Nieto por su presunta relación con el caso Odebrecht.