Si usted ha tenido como mascota a un perro, es muy común que cuando lo ha sacado a pasear, el muy desvergonzado busca cualquier coche que esté estacionado para orinar sobre sus llantas.
Nunca se ha preguntado ¿por qué?, ¿cuál es la razón por la que los canes hacen sus necesidades ahí? Todo tiene una respuesta.
Bien es sabido que los perros, más allá de una necesidad fisiológica, orinan también por marcar territorio. Una forma de demostrar quién domina sobre ese lugar.
Una nota de La opinión publicó que los perros saben que los autos sirven para transportarse a diversos lugares, a donde ellos quizá no podrían llegar y en ese sentido, orinan en las llantas para que, de alguna manera, su presencia llegue a más sitios.
Lo cierto es que hay tres teorías que podrían señalar por qué un coche es objetivo de los perros.
1.- La teoría de los mil olores
Las llantas son como los zapatos de un humano (una explicación más si tu perro orina tus zapatos), por lo que la sustancia y olores de la orina de un perro al moverse deja huella de su olor, con el fin de que otros perros que pasen por ahí sepan que ese territorio ya está marcado.
2.- Teoría de la relación del entorno
Al saber conceptualizar objetos, el perro asocia los autos como un medio de movilidad o transporte, y como las llantas están al alcance de los canes, se vuelven un rito habitual para pasar, oler y dejar su huella. Lo importante es que ellos saben que el auto viene y va.
3. Teoría química
Se dice que al estar en uso un automóvil, los neumáticos se calientan y al estacionarlo tardan algunos minutos para que se enfríen. Científicos han determinado que el hule o la goma de las llantas al ser 100% sintéticos emanan una sustancia química, que al viajar por las fosas nasales de un perro que pasa caminando por la calle, le activa la corteza frontal del cerebro, encargada de la orina y éste detona sus ganas de ir al baño.
Con información de la opinión