Columna El circo de la realidad
Creo que la elección de Joe Biden, no representa problemas directos contra el Gobierno de México, como muchos advierten; sin embargo, sí representa una forma muy distinta de diplomacia comparada con la de Donald Trump.
La política internacional de Trump, digamos es más explosiva y menos diplomática, muy de anuncios vía redes sociales, emitiendo juicios de valor y dejando con muy pocas herramientas de diálogo a sus diplomáticos. Me atrevo a decir que en el caso de Biden, ahora, Presidente electo, antes Vicepresidente con Barack Obama y un político profesional; la política exterior tendrá un sello más diplomático, pero no menos protagonista. Biden tiene una amplia experiencia en política exterior, y podemos decir, un genuino interés por los asuntos mundiales. Biden presidió el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, y e incluso realizaba él mismo viajes a Irak y a Afganistán en sus “fact finding missions” es decir viajes para ver los hechos en el terreno, por solo poner un ejemplo.
Biden de inmediato buscará poner a su país como cabeza en el centro de las decisiones globales, pero a diferencia de Trump, lo hará buscando aliados, lo hará por la vía de la diplomacia efectiva.
En el caso de los temas con México, habría que clasificarlos en temas de siempre: Seguridad, Migración, Intercambio Comercial, Narcotráfico, Seguridad, Armas, Salud fronteriza, Derechos Humanos.
Temas opuestos al Gobierno de México y al Gobierno de Trump: La agenda verde: Biden ha anunciado inversiones por 2 billones de dólares en sus cuatro años para revertir como el dijo “recuperar para Estados Unidos una posición relevante en la discusión global de la agenda verde y acelerar la transición energética de la economía estadounidense.” Incluso dijo en campaña que en el 2030 ya no habrá en Estados Unidos electricidad generada en base a carbón. Sin duda esta es una visión distinta de lo que se promueve desde nuestro Gobierno y sin duda puede ser un tema en la agenda bilateral.
La prioridad de Biden no estará en ésta región del mundo, estará en Europa y por supuesto en China, sin embargo por la vecindad es imposible poner a México en la última prioridad.
Los temas bilaterales entre México y Estados Unidos, segurián siendo complejos, seguirán siendo dificiles, ahora el cambio, es que del lado de Estados Unidos, habrás más diplomacia, más profesionalismo e incluso más claridad. Momento para que la diplomacia mexicana, tambien con mucha experiencia, pueda lograr acuerdos beneficos para nuestro País.
Acerca del autor: Fue Regidor en el Ayuntamiento de Hermosillo; Diputado Local y Federal; Cónsul de México en Albuquerque New México, Funcionario Internacional en la Organización de Estados Americanos.