Autoridades de Colombia aseguraron un cargamento de 1.015 kilogramos de clorhidrato de cocaína que presuntamente pertenecía al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y cuyo destino final era Tecámac, Estado de México.
De acuerdo con la Dirección de Antinarcóticos, la droga fue localizada oculta dentro de una máquina separadora electromagnética marca Eriez Magnetics, durante una inspección de rutina. Al ser intervenido el artefacto, agentes descubrieron múltiples bloques de cocaína, algunos de ellos con el logotipo de la marca de autos Ferrari.
Las autoridades estimaron que el aseguramiento equivale a unas 2 millones y medio de dosis, que en el mercado internacional representarían un golpe financiero de alrededor de 14 millones de dólares para la estructura criminal mexicana.
“El alcaloide pertenecería al Cártel de Jalisco Nueva Generación. Con esta operación se logró afectar significativamente las finanzas de la estructura criminal”, informó la institución antidrogas.
El hallazgo se enmarca en la estrategia Esmeralda Plus, que busca combatir el crimen organizado transnacional y reforzar la cooperación entre países. El titular de la Dirección de Antinarcóticos, Ricardo Sánchez Silvestre, afirmó que Colombia mantiene su compromiso de trabajar en conjunto con otros gobiernos en la lucha contra el narcotráfico:
“La Dirección de Antinarcóticos reafirma su compromiso con la seguridad nacional e internacional, trabajando continuamente para combatir el crimen organizado en todos los niveles”.
Exmilitares colombianos al servicio del crimen organizado
El aseguramiento se da en un contexto en el que se han detectado vínculos entre ciudadanos colombianos y organizaciones criminales mexicanas. Desde diciembre pasado, investigaciones apuntan al reclutamiento de exmilitares colombianos mediante falsas ofertas de trabajo, que posteriormente terminan integrados en actividades de vigilancia o distribución de drogas.
En junio de este año, 11 colombianos fueron detenidos en Michoacán y vinculados a proceso tras un ataque con explosivos artesanales contra elementos del Ejército mexicano. La cancillería de Colombia confirmó entonces que entre los detenidos había 12 connacionales y, de ellos, 11 habían pertenecido a las fuerzas armadas de ese país.
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Con este nuevo decomiso, las autoridades colombianas insisten en que el CJNG mantiene redes activas de colaboración internacional para el trasiego de cocaína, lo que refuerza la necesidad de intensificar las acciones conjuntas de seguridad entre Bogotá y Ciudad de México.