Allison Mack salió el lunes de una cárcel federal en Dublin, California, tras pasar dos años entre rejas por sus vínculos con la secta sexual NXIVM.
En abril de 2019, la actriz se declaró culpable por cargos de conspiración y extorsión relacionados con un culto que se hacía pasar por una compañía de autoayuda.
Se cree que Mack reclutaba a mujeres convenciéndolas para integrar junto a ella un grupo de formación de mentoras femeninas, a quienes posteriormente obligaba a subordinarse sexualmente a Keith Raniere.
Un tribunal federal de Brooklyn condenó a la actriz a tres años de prisión y una multa de 20 mil dólares por estos hechos.
La condena fue mucho menor que el mínimo de 14 años que buscaban los fiscales.
La agencia AP señala que esto se debió a que cooperó con las autoridades federales en el caso contra el líder de la secta, ayudando a reunir pruebas acerca de cómo creó una sociedad secreta.
Mack se convirtió en la primera sentenciada del caso NXIVM que completa su condena.
Nancy Salzman, de 68 años, será liberada en julio de 2024 tras cumplir una pena de tres años y medio, mientras que Clare Bronfman, de 44, hará lo propio en junio de 2025 tras una sentencia de 81 meses, detallan medios locales.
Por su parte, Keith Raniere, de 62 años, fue condenado a 120 años en una prisión federal en Tucson, tras ser hallado culpable de tráfico sexual, conspiración de trabajo forzado, fraude electrónico y cargos de extorsión.
Información de Actualidad RT