El último presidente republicano antes de Donald Trump, George W. Bush, felicitó este domingo a Joe Biden como presidente electo tras la proyección de resultados del sábado.
Statement by President George W. Bush: https://t.co/Bsbv8k1nho pic.twitter.com/O7CLtEvxk0
— George W. Bush Presidential Center (@TheBushCenter) November 8, 2020
“Aunque tenemos diferencias políticas, sé que Joe Biden es un buen hombre que se ha ganado la oportunidad de unir y liderar nuestro país”.
El comunicado del expresidente Bush sería apenas una cortesía en cualquier otra elección, y no especialmente relevante. Pero Bush emitió su felicitación mientras los líderes republicanos en el Capitolio coreaban la teoría conspirativa del presidente Trump de que le han robado la elección. A mediodía del domingo, Bush era el republicano más importante de EE UU que ha dado la elección por terminada.
“Acabo de hablar con el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden”, comienza el comunicado, enviado a los medios este domingo a las 11:30, hora de Dallas, donde Bush tiene su residencia. “Le he dado mi sentida enhorabuena y le he dado las gracias por el mensaje patriótico que dio anoche (por el sábado). También he llamado a Kamala Harris para felicitarla por su histórica elección como vicepresidenta”. Bush destaca en su mensaje que “el presidente electo ha reiterado que, si bien se ha presentado como demócrata, va a gobernar para todos los estadounidenses”.
El expresidente Bush vivió la elección más disputada que recuerda Estados Unidos cuando ganó el Estado de Florida por apenas unos cientos de votos en 2000 frente al entonces vicepresidente demócrata Al Gore. Las evidencias de errores en las papeletas de Florida desataron una fenomenal batalla judicial por el recuento de los votos que llego hasta el Tribunal Supremo. Después de más de un mes de intriga, el Supremo detuvo el recuento de los votos y otorgó de facto la presidencia a Bush.
Aquel precedente es el que pretende utilizar ahora el presidente Donald Trump para disputar el escrutinio electoral que le ha dado la victoria a Biden en varios Estados clave, en un conteo que está siendo muy lento debido a la cantidad sin precedentes de votos por correo. El equipo legal de Trump está presentando demandas en todos los Estados en los que el resultado está ajustado (Pensilvania, Georgia, Míchigan, Arizona y Nevada) en busca de supuestos “votos ilegales” que no deberían contarse. En cinco días no han conseguido mostrar una sola prueba de sus afirmaciones, pero Trump se agarra a esta teoría de la conspiración para negarse a aceptar el resultado, algo inaudito en la democracia norteamericana.
Bush se refiere directamente a esta cuestión en su comunicado. Primero, felicita a Trump por sacar más de 70 millones de votos y asegura que “sus voces serán escuchadas”. Pero a continuación advierte: “El presidente Trump tiene el derecho a pedir recuentos y presentar objeciones en los tribunales, y cualquier cuestión no resuelta será decidida de forma apropiada. La gente puede confiar en que esta elección ha sido justa en lo fundamental, se ratificará su integridad, y el resultado está claro”. Bush concluye: “Pedimos a todos los estadounidenses que se unan a nosotros para desear lo mejor a nuestros próximos presidente y vicepresidenta mientras se preparan para hacerse cargo de sus importantes obligaciones”.
Información de El País