Este lunes 16 de junio, Culiacán despertó con un ambiente cálido y húmedo que, desde la madrugada, anticipa una jornada bochornosa.
Aunque los termómetros marcaban 29 grados Celsius al amanecer, la sensación térmica superaba los 32 grados, reflejo de la elevada humedad ambiental, que se ubicó en 65%.
El cielo permanece cubierto de nubes, pero no se esperan lluvias. La atmósfera se mantiene estable, con una presión de 1013 milibares y un nivel de precipitación nulo en el pronóstico. Mientras tanto, el viento del norte apenas roza los 4 km/h, lo que ofrece escaso alivio ante el calor sofocante.
Aunque todavía es temprano para hablar de radiación solar, el índice UV es de 0, y se espera que aumente conforme avance el día. El punto de rocío, que ronda los 22 grados, contribuye a una sensación de pesadez en el ambiente, típica de los veranos en esta zona del país.
La visibilidad es buena, con un alcance de hasta 10 kilómetros, lo que permite desplazamientos sin complicaciones, a pesar de las condiciones nubladas.
Para más tarde se prevé un leve incremento en la intensidad del viento, que podría alcanzar 10.8 km/h, aunque no se anticipan cambios drásticos en las condiciones generales del clima.
Ante este panorama, se recomienda hidratarse con frecuencia, evitar esfuerzos físicos prolongados al aire libre y protegerse del sol, especialmente durante las horas centrales del día, cuando el calor podría sentirse con mayor intensidad a pesar del cielo cubierto.
Así, Culiacán arranca la semana con el sello característico de su temporada cálida: altas temperaturas, humedad dominante y sin señales de lluvia en el horizonte.
Con información de DEBATE