Un estudiante de arte de Corea del Sur se comió un plátano de una exhibición de Maurizio Cattelan, argumentando que “tenía hambre” porque no desayunó.
La obra titulada “Comediante”, parte de una exhibición del artista llamada “WE”, consistía en una banana madura pegada con cinta adhesiva a una pared del Museo de Arte Leeum, en Seúl.
Después de comerse la fruta, Noh Huyn-soo pegó su cáscara a la pared. El museo más tarde reemplazó el platano en el mismo sitio, según reportan los medios locales.
El incidente, que duró más de un minuto, fue grabado por un amigo de Noh. Sin embargo, sus autoridades informaron a los medios que no buscarán una compensación por daños de parte del estudiante.
Se estima que la banana de la obra se reemplaza cada dos o tres días.
En una serie de videos publicados en internet, se pueden escuchar gritos diciendo “disculpe” cuando Noh saca la banana de la pared.
Él estudiante no responde y comienza a comer mientras la sala se queda en silencio.
Al terminar, después de pegar la cáscara en la pared, Noh se marcha caminando y más tarde le dijo a un medio local que veía la obra de Cattelan como un acto de rebelión contra la autoridad.
“Puede haber otra rebelión contra la rebelión. El dañar una obra de arte puede también ser visto como una obra de arte.
Pensé que eso sería interesante… ¿No está pegada allí para que la coman?”.
Cuando el artista se enteró del incidente dijo: “No hay ningún problema”.
Esta no es la primera vez que alguien se come las bananas utilizadas en la obra de Cattelan.
En 2019, el artista David Datuna sacó la banana de la pared después de que la obra se vendiera por 120 mil dólares a la muestra Art Basel en Miami.
La banana en esa instancia también fue reemplazada y no se tomaron medidas.
Con información de BBC