La falta de políticas publicas y la omisión de nuestros gobiernos durante décadas ha ocasionado que crezca exponencialmente la cifra de perros y gatos en nuestro país al grado de que no hay espacios para todos, pues se estima que un 70% están en las calles. Solo en nuestro municipio se calcula que hay unos 175 mil perros y gatos callejeros viviendo en el olvido como otras tantas problemáticas sociales con las que lidiamos día a día y que no parecen tener fin. Sin embargo, si no empezamos a lidiar con el problema de raíz y solo atacamos con las consecuencias entonces si jamás daremos vuelta a la página. La solución no viene dada por una sola estrategia, es un cúmulo de acciones que deben converger entre ellas: esterilización, educación y legislación.
Esterilización: hay que definir la meta y ello se hace a partir del total de animales que actualmente se estima que hay -unos 250 mil en Hermosillo por ejemplo-, el mínimo a esterilizar deberá ser el 10% anual, cualquier cifra por debajo de ese porcentaje resultará inútil y no tendrá ningún impacto en el control población. Para que el programa sea exitoso deberá ser gratuito, permanente, masivo, sistemático y deberá abarcar a los animales de todos los sectores de la población.
Educación: campañas intensivas a la población sobre el cuidado de los animales domesticados y de compañía.
Legislación: destinar recursos específicamente para operar la Ley de Protección de Animales para el Estado de Sonora, prohibir la venta de animales y decretar la esterilización de perros y gatos como obligatoria, son algunas de las acciones imperativas que deben tomarse con carácter de urgencia.
No es con una sola línea de trabajo que se resolverá la grave problemática de sobrepoblación de fauna urbana, no es con albergues o refugios sino con acciones integrales contundentes que deben iniciarse a la brevedad.