El Gran Premio de Emilia Romagna resultó una de las carreras más complicadas para Checo Pérez en los últimos años.
El piloto mexicano tuvo un par de incidentes que lo alejaron de los primeros lugares, lo que provocó que se fuera sin puntos de Imola al finalizar en décimo segundo lugar.
Sin embargo, la victoria fue para Red Bull, pues Max Verstappen se llevó el primer sitio, seguido por un monumental Hamilton y un sorprendente Lando Norris, quienes completaron el podio.
Desde la largada se auguraba una difícil carrera para Checo. Verstappen tuvo un inicio feroz y en segundos se colocó en la punta tras iniciar tercero, mientras que el tapatío cayó al cuarto sitio luego de un rebase de Leclerc.
Todo transcurría sin contratiempos hasta que llegó la noticia inesperada: 10 segundos de sanción para su Red Bull por retomar su sitio tras salirse de la pista en la vuelta 6 durante un safety car, mismo que fue provocado por un trompo de Latifi previo toque de Mazepin.
A pesar del duro golpe, Sergio mantuvo a Norris a más de 10 segundos, por lo que apostaba por mantener su cuarto puesto. Fue en la vuelta 29 cuando Checo fue a los pits, cambió de neumáticos y cumplió su castigo. Regresó a la carrera en quinto.
Tras unos minutos de espera, la carrera se reanudó en la vuelta 35. Pérez era cuarto y apostaba por rebasar a Norris (3º) y Leclerc (2º) para luchar por el podio junto a su coequipero, Verstappen. Sin embargo, hoy fue uno de esos domingos que pocas veces se han visto durante la estancia de Sergio en la F1. Falló.
Un error de manejo provocó un trompo en su Red Bull y bajó al puesto 14. A pesar de rebasar un par de pilotos, ya no se pudo recuperar.
Fuente: Marca.com