El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, envió a la Cámara de Diputados una iniciativa para reformar la Ley de Hidrocarburos, la cual fue turnada a la Comisión de Energía, para dictamen, y a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, para opinión.
La iniciativa se poponer dar a las empresas del Estado un papel más activo en toda la cadena de esta industria y pretende desincentivar prácticas de corrupción.
Se busca -informó la Cámara de Diputados en un comunicado- desincentivar diversas prácticas relacionadas con el comercio ilícito de hidrocarburos y petrolíferos, así como reordenar diversas actividades económicas en el sector energético, con el fin de combatir la corrupción, garantizar el abasto, proteger la economía nacional y los ingresos que percibe el Estado.
Según la iniciativa y de acuerdo con una estimación de la Cámara de Diputados, la cantidad de litros diarios no entregados a los consumidores por corrupción, asciende a un millón 736 mil litros, lo que a un precio promedio de 19.32 pesos implicaría que las gasolineras que utilizan el software conocido como “rastrillo” o componente, obtienen ganancias que ascenderían a 33 millones 539 mil 520 pesos diarios.