Apple anunció el lanzamiento de la plataforma Apple Pay para clientes de iPhone y Apple Watch, que desde este martes, permitirá pagar a los clientes mexicanos sus compras cotidianas.
Este es uno de los servicios de pago más populares del mundo, que se lanzó en octubre de 2014. La aplicación permite hacer pagos en tiendas y otras apps de “forma fácil y segura” utilizando iPhone y Apple Watch, la cual se puede emplear para pagar las compras del supermercado, comprar la comida del día y muchas cosas más.
“Hoy más que nunca, nuestros clientes quieren una opción de pago fácil, segura y sin contacto”, afirmó Jennifer Bailey, vicepresidenta de Apple Pay en Apple. “Trabajamos con bancos, redes de pago y comercios de todo México para habilitar el uso de Apple Pay en las apps y tiendas más importantes del país”, aseguró.
Por ahora solo es compatible con tarjetas de crédito y débito de American Express y Mastercard, emitidas por los principales bancos de México, incluyendo Citibanamex, Banorte y muy pronto, Inbursa.

¿Cómo usarlo? Apple Pay funciona de forma fácil y rápida, sólo se debe acercar el iPhone o Apple Watch a la terminal de pago y autenticar la identidad mediante Face ID o Touch ID, sin tocar botones o intercambiar dinero.
Todas las compras realizadas con Apple Pay se deben autentificar con Face ID, Touch ID o el código del dispositivo y el código de seguridad dinámico único generado en el momento.
Se puede usar sin tener que crear una cuenta ni llenar formularios o tener que escribir sus datos de envío y facturación varias veces. Sólo se deben elegir los productos o servicios y, al momento de pagar, seleccionar Apple Pay para completar la transacción.
¿Cómo funciona la seguridad? Quienes sean clientes de Apple en México recibirán los beneficios de proteger su información personal, transacciones y datos de tarjeta de crédito o débito con la seguridad que ofrece la aplicación.
Al agregar una tarjeta, el número no queda almacenado en el dispositivo ni en los servidores de Apple, sino que se asigna un número de cuenta al dispositivo que queda cifrado y almacenado en el Secure Element. Cada transacción se autoriza mediante un código de seguridad dinámico y único generado en el momento.
“Apple no guarda información sobre las compras que luego podrían ser vinculadas al cliente. Todas las transacciones quedan entre el usuario, el comerciante o desarrollador, y el banco o emisor de la tarjeta. Si el cliente pierde su iPhone o se lo roban, puede usar la funcionalidad Buscar Mi iPhone para suspender rápidamente los pagos desde ese dispositivo”, explicó la empresa.