En medio de un brote de Covid-19 en la prisión de Belmarsh en Londres, Nils Melzer, un experto independiente de Naciones Unidas, apeló este martes a las autoridades británicas para que liberen a Julian Assange o lo pongan bajo arresto domiciliario vigilado durante los procedimientos de extradición a Estados Unidos.
“Assange no es un convicto criminal y no representa una amenaza para nadie, por lo que su confinamiento solitario prolongado en una prisión de alta seguridad no es necesario ni proporcionado, y claramente carece de base legal”, dijo Melzer, relator especial de la ONU sobre la tortura.
De acuerdo con ONU Noticias, Melzer señaló que 65 de los 160 presos de Belmarsh han contraído Covid-19, entre ellos algunos de los reclusos del ala donde se encuentra detenido el fundador de WikiLeaks.
“Las medidas de descongestión carcelaria observadas en todo el mundo en respuesta al Covid-19 deben extenderse a todos los reclusos cuyo encarcelamiento no es absolutamente necesario”, dijo el Relator Especial.
“En primer lugar, las medidas alternativas no privativas de la libertad deben extenderse a aquellos con vulnerabilidades específicas, como el Sr. Assange, que padece una afección respiratoria preexistente”.