Un hombre identificado como “El Gárgola”, presunto integrante del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), fue abatido la noche del martes en la colonia 28 de octubre, sobre la calle Plan de Ayala. El hecho desencadenó un enfrentamiento entre policías municipales y civiles armados, en el que dos agentes resultaron heridos.
El alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, confirmó que el sujeto era considerado por documentos de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) como uno de los principales generadores de violencia en el municipio. Según la información disponible, estaba vinculado a delitos como ejecuciones, robo de vehículos, extorsión, narcomenudeo y secuestros.
De acuerdo con el edil, la agresión en su contra habría sido perpetrada por un grupo rival. “Seguramente algún grupo antagónico al que pertenecía ‘El Gárgola’ fue a agredirlo, a hacer ajuste de cuentas”, declaró Manzo.
Tras el ataque, policías municipales que realizaban recorridos de seguridad detectaron una camioneta Edge gris en la que presuntamente huían los agresores, armados con fusiles. La persecución se extendió por varias calles hasta el Barrio del Vergel, donde ocurrió un intercambio de disparos.
Como resultado, dos agentes resultaron lesionados y fueron trasladados a un hospital, donde se reportan fuera de peligro. Los civiles armados lograron escapar, aunque el alcalde indicó que también habrían resultado heridos. “Las investigaciones sobre estos hechos ya le corresponde a la Fiscalía General del Estado dar con los responsables y aplicar el castigo que corresponda por ley”, añadió.
Este caso se suma a otros hechos relacionados con integrantes del CJNG en el municipio. El pasado 27 de agosto, Manzo informó sobre la detención de René Belmontes, alias “El Rhino” o “El Chamuco”, señalado como jefe de plaza del grupo criminal.
Ante la ola de violencia, el alcalde solicitó apoyo al titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, así como a las Fuerzas Armadas y a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para reforzar la seguridad en Uruapan.
Como medida preventiva, también decidió cancelar el Grito de Independencia y las celebraciones patrias, luego del asesinato de un agente municipal el 14 de septiembre, en el que otro resultó herido.