Hermosillo, Sonora.- Natanael Cano, pionero de los corridos tumbados y una de las figuras más influyentes del regional mexicano actual, sorprende con un giro sonoro en su nuevo álbum, en el que se aleja de las raíces que lo catapultaron a la fama para adentrarse en terrenos musicales más diversos e introspectivos.
Originario de Hermosillo, Sonora, ‘El Nata’ ha construido una carrera marcada por la innovación y el atrevimiento.
Esta vez, presenta un trabajo en el que fusiona géneros como el trap, el reguetón y el afrobeat, dejando atrás los corridos tumbados que él mismo ayudó a posicionar como tendencia global.
“Es un álbum que refleja dónde estoy hoy, no solo como artista, sino como persona”, señala el sonorense en un comunicado.
“En canciones como ‘Primero Muerto’ y ‘No Vuelve’, se muestra una vulnerabilidad romántica que pocas veces he compartido antes. También hablo del éxito, la identidad y la incertidumbre que conlleva este camino”, añade.
Aunque Natanael Cano ha sido sinónimo del corrido tumbado, nunca se ha conformado con ser etiquetado. Desde hace años ha dado señales de su interés por explorar nuevos sonidos.
Su colaboración con Steve Aoki en un tema con tintes de house, y su participación en una BZRP Music Session dejaron claro que el joven artista busca expandir sus horizontes creativos.
Este nuevo material incluye colaboraciones con voces destacadas del panorama urbano latino como Eladio Carrión, Myke Towers y Ganggy, con quienes comparte una visión musical que trasciende géneros y etiquetas.
Una nueva etapa
Este disco representa más que un cambio de estilo: es un paso firme hacia la madurez artística de Cano.
Con letras que exploran emociones profundas y una producción que abraza la evolución sonora del continente, el artista sonorense deja claro que su ambición no tiene límites.
Lejos de abandonar sus orígenes, Natanael los utiliza como punto de partida para construir una propuesta musical más compleja, diversa y emocionalmente honesta.
Una que reafirma su lugar, no solo en el regional mexicano, sino en el universo más amplio de la música latina contemporánea.