Por Bárbara Encinas
Ciudad de México.- Cientos de migrantes partieron el domingo 12 de enero desde Chiapas hacia la Ciudad de México, buscando llegar a Estados Unidos, a una semana de la toma de posesión de Donald Trump, quien asumirá la presidencia el 20 de enero.
Migrantes originarios de Panamá, Ecuador, Perú, Colombia, Venezuela, Honduras, El Salvador, Guatemala, Haití, entre otros, viajan hacia EEUU, pese a las amenazas de Trump de una deportación masiva.
El activista Luis Rey García Villagrán, representante del Centro de Dignificación Humana, advirtió al presidente electo que, “por cada avión que mande a Tapachula va a salir una caravana de migrantes y por cada ofensa que haga a los mexicanos, se va a bendecir”, además de mencionar que por cada persona que deporte entrarán 10 a Estados Unidos.
García Villagrán agregó que “por cada acción de xenofobia o de racismo del imperio, los mexicanos vamos a contestarle con bendiciones, la gente latina, los hermanos de Venezuela, los cubanos, peruanos, colombianos, nicaragüenses y hondureños, todos, somos gente de trabajo que ha mantenido a Estados Unidos como fuerza económica, que no se preocupe Trump, a Estados Unidos va pura gente trabajadora”.
Gorman Almeida, originario de Venezuela, confía y espera que, con la llegada de Trump meta presión “a la dictadura de Nicolás Maduro”, recordando que fue investido como presidente el pasado viernes, porque dijo que en su país “se violan los derechos humanos”.
“La situación en el país cada día está peor, para nadie es un secreto que el régimen de Maduro está sacando presos de las cárceles para uniformarlos y los hace pasar como funcionarios del Estado para reprimir, torturar, extorsionar y hasta por lo que hoy luchamos, por la libertad de Venezuela, por lo que se está quedando sin gente Venezuela”, dijo a la agencia EFE.
Por su parte, Adrián Duarte, quien pasó con una primera caravana saliendo de San Pedro Sula el pasado 7 de enero, recordó que todos buscan una mejor calidad de vida y huyen de la inseguridad, la violencia y la falta de empleo.
“Ese es el miedo que está metiendo (Trump) eso no tiene nada que ver nosotros, cada cabeza es un mundo, nosotros vamos para adelante, no tengo miedo a las deportaciones, me pueden regresar 10 veces y me voy a volver a meter”, dijo Duarte.
La semana pasada, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, propuso que este mes de enero haya una reunión entre los ministros de Exteriores de América Latina para abordar los retos de la migración en la llegada de Trump a la Casa Blanca.
Sheinbaum, quien ha dicho estar preparada para recibir a los mexicanos deportados, ha reiterado una “insistencia a Estados Unidos de que la repatriación se haga a los distintos países de origen”, en lugar de expulsarlos a todos a México.
Con información de Aristegui Noticias.