La presidenta Claudia Sheinbaum defendió este jueves, durante la conferencia en Palacio Nacional, la ‘supremacía constitucional’, criticando que la oposición use esta reforma para “buscar desacreditar” la reforma al Poder Judicial,; por lo que reiteró que ninguna de estas reformas puede ser calificada como inconstitucional.
Así, la mandataria afirmó que lo que se está haciendo con la reforma de ‘supremacía constitucional’ no es violatorio a la Carta Magna” y agregó que dicha norma “es republicana”.
De la misma forma, mostró sorpresa ante quienes presentan la reforma de ‘supremacía’ constituciomal como una “novedad”, ya que afirma hay múltiples documentos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, e instituciones como la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que prueban su existencia desde hace tiempo, además de que no se debe ser abogado para saber “que la Constitución es la ley máxima“.
Parece como si fuera ofensa la supremacía constitucional, ¿cuál novedad hay en eso? Si es la ley máxima.
Cuestionada sobre el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá que propone invalidar parcialmente la reforma judicial y la renuncia de ocho ministros de la SCJN, que rechazaron contender por sus cargos en la elección judicial del 1 de junio de 2025, Sheinbaum insistió en que se trata de un proyecto que intente revertir la reforma judicial sin argumentos constitucionales, por lo que tachó la postura del bloque mayoritario de la Suprema Corte de ser “una provocación” para que ella decida perseguir a los ocho ministros y ministras del bloque mayoritario en el Pleno de la Corte.
“Nos están provocando ¿en qué sentido? Quieren que la presidenta los lleve a juicio político, a los ministros, a las ministras, algo así. No lo vamos a hacer, por más que estén violando la Constitución”, aseveró.
Los ocho inconformes, liderados por la presidenta del Supremo, Norma Lucía Piña Hernández, harán efectiva su renuncia a partir del 31 de agosto del próximo año.
“Todavía pienso yo, fíjense, qué bien pensada soy, que hay ministros y ministras dentro de esos ocho, que van a recordar sus clases, su historia y cómo van a pasar a la historia, porque ellos y ellas saben que están tomando una decisión política, no jurídica, en contra del pueblo de México y a favor de ciertos grupos de interés y de sus propios intereses”, señaló.
Sheinbaum criticó a los ministros pues dijo que en gobiernos anteriores respaldaron reformas constitucionales que atentaban contra los intereses de México y ahora se están pronunciando en contra de iniciativas como la Reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), la cual han propuesto invalidar parcialmente.
La reacción de Sheinbaum ocurre apenas unas horas después de que la Cámara de Diputados aprobara una polémica reforma que establece la improcedencia de amparos y controversias contra reformas a la Constitución.
El dictamen que fortalece la denominada ‘supremacía constitucional’ y limita los alcances de las resoluciones judiciales que suspendan leyes o actos del Congreso y del Ejecutivo, ya fue enviado a las legislaturas locales para su aprobación, previo a su publicación oficial y posterior entrada en vigor.
Inseparable e imparable de la Constitución: Abogado
El doctor en derecho y consejero de Control Constitucional de la presidencia de la República, Raúl Jiménez, fue invitado a la mañanera por Sheinbaum para explicar qué es la ‘supremacía constitucional’, afirmando que una vez que se publique el decreto, será “inseparable de la Constitución, de cumplimiento absoluto e imparable”.
Jiménez Vázquez explicó en Palacio Nacional que la supremacía constitucional es una categoría jurídica de caracter superior que tiene raíces “tanto en la teoría, en la doctrina jurídica, en la judicial, y en nuestro artículo 133 constitucional”.
Quiere decir que la Constitución, la Carta Magna, es el texto fundante del orden jurídico mexicano: federal, estatal y municipal. La Constitución tiene supremacía porque justamente impera absolutamente y está por encima de todas las disposiciones constitutivas de la pirámide normativa del derecho nacional.
Por tanto, afirma el juicio de amparo es improcedente contra reformas o adiciones a la constitución, y es necesario reconocer lo que ya existe como realidad jurídica y con obligación a seguir por parte de los tribunales.
Ahora, con la reforma, que también afirmó no es ninguna novedad, lo que sucede es que “a través del poder reformador de la Constitución se elevó a rango constitucional el impedimento para someter a revisión judicial las reformas o adiciones en general, y en particular, las que nos ocupan en esta parte del proceso histórico de nuestro país. Y fue así como en el artículo 107 constitucional se establece que el juicio de amparo es improcedente contra reformas o adiciones a la Constitución”.
Con información de EFE