EL CAIRO (AP) — Tanques israelíes tomaron el martes el control del vital cruce fronterizo de Rafah en Gaza, mientras Israel hacía caso omiso de las advertencias urgentes de sus aliados y avanzaba hacia la ciudad del sur, incluso cuando las negociaciones de alto el fuego con Hamás seguían al filo de la navaja.
La ONU advirtió sobre un posible colapso del flujo de ayuda a los palestinos por el cierre de Rafah y el otro cruce principal hacia Gaza, Kerem Shalom, en un momento en que los funcionarios dicen que la parte norte del enclave ya está experimentando una “hambruna en toda regla”.
La incursión israelí se produjo tras horas de tensiones en la guerra que libran Israel y Hamás, donde el grupo insurgente dijo en la víspera que aceptaba la propuesta de alto el fuego mediado por Egipto y Qatar. Israel, por su parte, insistió en que ese acuerdo no satisfacía sus principales demandas.
La iniciativa diplomática de alto nivel y las maniobras militares dieron un atisbo de esperanza, aunque pequeño, para cerrar un pacto que pudiese al menos pausar los siete meses de guerra que ha dejado más de 34 mil 700 palestinos muertos, de acuerdo con autoridades locales de salud, y devastado Gaza.