Una corte de Canadá aseguró que el emoji de “pulgar arriba” es confirmación suficiente para sellar un contrato.
La sentencia de una corte de Saskatchewan, en Canadá, tiene que ver con la denuncia de un hombre que asegura que al recibir un emoji de pulgar arriba en un mensaje de texto, el emisor estaba confirmando estar de acuerdo con una transacción.
Según la disputa legal, Kent Mickelborough ofreció comprar 87 toneladas métricas de linaza al granjero Chris Atcher; el comprador firmó un contrato de compra y le envió una foto al granjero.
Atcher respondió con un 👍, lo que según el granjero representaba un aviso de que recibió la foto del contrato.
Para Mickelborough, sin embargo, el emoji representaba la confirmación de que había aceptado el contrato de compra.
“Esta corte reconoce que un emoji de pulgar arriba (👍) es una forma no tradicional de ‘firmar’ un documento, pero aún así bajo estas circunstancias fue una forma válida de aceptar el contrato”, señaló.
Además, dijo que la importancia de que el 👍 fue enviado desde el número de teléfono personal del granjero.
Por lo tanto, la denuncia no llegó a juicio, la justicia de esta corte canadiense decidió que el contrato debía llevarse a cabo.
En el pasado, según el caso, Mickelborough y Atcher ya habían llevado a cabo muchos negocios, en los que normalmente el granjero respondía a los mensajes de confirmación de contrato con “se ve bien” y “sip”, por lo tanto, “el emoji es una acción en forma electrónica” para aceptar el documento, determinó la corte.
Más allá de este caso concreto, es interesante ver cómo este tipo de respuestas y formas no tradicionales de comunicación, mediante dispositivos electrónicos, podrían convertirse en un estándar para aceptar, rechazar o confirmar acuerdos de forma legalmente válida.
Información de Gizmodo