Ciudad de México, 2 de jueves (SinEmbargo).- De los cinco jóvenes asesinados a manos del Ejército en Nuevo Laredo, Tamaulipas, el pasado 26 de febrero, al menos dos de ellos habrían recibido más de 10 balas, mientras uno recibió un disparo en la sien, según han reportado los periódicos El Universal y El País.
El Universal detalló que los resultados de la autopsia de cinco de los jóvenes asesinados: uno recibió dos disparos con orificio de entrada y salida en el antebrazo izquierdo, y otro con orificio de entrada y salida en el costado izquierdo; un segundo joven, 10 impactos de bala; mientras que un tercero recibió el tiro en la sien; otro de los jóvenes recibió cinco disparos; y el quinto recibió 12 balazos.
Por su parte, Pablo Ferri de El País señaló que la autopsia realizada por peritos de la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas entre el 26 y el 27 de febrero, desmiente la versión oficial del Ejército de que sólo dispararon en la persecución, pues por la ubicación de los más de 30 disparos que recibieron los jóvenes, se revela en el documento que recibieron de atrás, de lado y de frente.
El periodista de El País reportó que la única persona que resultó ilesa del ataque confesó que fueron los militares quienes primero cocharon con la camioneta donde se transportaban y luego empezaron el ataque armado, que terminó con la muerte de cinco jóvenes de entre 20 y 25 años, otro joven que se encuentra en coma inducido y la persona ilesa.
Además, las dos personas que más recibieron heridas de bala fueron el piloto y el copiloto, 10 y 12, respectivamente, por lo que se desmiente la versión que publicó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) “explicando” los hechos.
Asimismo, por la nula resistencia y la escena del crimen, los veinteañeros no portaban ningún tipo de arma, pues según se ha reportado en los medios, habían salido socialmente esa noche.
De acuerdo con el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, las víctimas fueron identificadas como Gustavo Pérez Beriles, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Gustavo Ángel Suárez Castillo (estadounidense) y Alejandro Trujillo Rocha. Otro joven, de nombre Luis Gerardo, fue reportado como grave.