Al menos 32 personas han muerto y una veintena ha resultado herida mientras otro centenar ha desaparecido por inundaciones en la provincia de Parwan, en el norte de Afganistán.
El director provincial del Departamento de Información y Cultura, Shamsulhaq Sediqi, dijo a la agencia DPA que un centenar de edificaciones han quedado parcial o completamente destruidas, así como las principales vías de acceso a los distritos de Sya Gird y Shinwari.
Los habitantes de la región también han visto cómo las lluvias han afectado a sus tierras y ganado. Parwan no ha sido la única provincia golpeada por estas inundaciones, puesto que las autoridades de Kapisa, Panjshir y Nangarhar han informado también de muertes e importantes daños.
“La situación es grave. Exigimos a las agencias nacionales e internacionales que brinden ayuda de emergencia para evitar otra catástrofe humanitaria”, ha reclamado el director de Información y Cultura de Kapisa, Karimullah Wasiq.
La situación podría empeorar en los próximos días ya que se espera que sigan cayendo lluvias. A pesar de que este tipo de inundaciones suelen ser comunes durante esta época del año, ya en 2020 casi cien personas murieron en Parwan, tras décadas de conflicto han impedido que las autoridades locales tomen precauciones.
En un país devastado por la guerra y los conflictos internos, Naciones Unidas (ONU) estima que unas 200 mil personas se hallan en estado de vulnerabilidad frente a desastres naturales de este tipo.
Información de Europa Press