Un barco pesquero se disponía a cruzar el mar desde Indonesia hacia Malasia y, en su interior, llevaba un botín de nada menos que 1,3 millones de euros en pangolines, uno de los mamíferos más traficados del mundo. Pero los 101 ejemplares de este animal que estaban hacinados en la embarcación fueron recuperados por las autoridades indonesias en la isla de Sumatra, según ha informado la Marina nacional en un comunicado.
Un centenar de pangolines, los únicos mamíferos con escamas del mundo, han sido rescatados vivos después de que residentes de la isla de Sumatra advirtieran de la presencia de esos ejemplares en un barco pesquero cerca de la costa. Dos personas, de 22 y 25 años, han sido arrestados por los agentes nacionales después de que confesaran haber recibido dinero para trasladar a los mamíferos desde Indonesia hacia Malasia. Si son encontrados culpables, los sospechosos se enfrentan a un máximo de cinco años de prisión o a pagar una multa de 6.200 euros por violar las leyes de conservación del país.
La comercialización de este mamífero está prohibida en más de 180 países por ser una especie amenazada. Dwi Adhiasto, de la Wildlife Conservation Society (WCS), que trabaja con las autoridades indonesias para hacer frente a este tipo de crímenes, calcula que la carga de pangolines está valorada en unos 22.000 euros en el punto de origen. Sin embargo, los animales podrían haber sido comercializados internacionalmente por 1,3 millones de euros en total: la carne del pangolín es considerada un manjar en China y sus escamas son utilizadas a veces como medicina.
“Recibimos 101 pangolines recuperados vivos por la Marina el martes, pero cuatro de ellos murieron después”, ha informado Mahfudz, el responsable de la agencia de conservación local. Los mamíferos recuperados serán reubicados en un parque nacional de la zona.
En las últimas décadas, más de un millón de pangolines han sido capturados en Asia y África, su hábitat natural, y el número de especímenes ha descendido de forma significativa. El número de estos animales ha bajado un 80% en los últimos 20 años, según calcula la WCS.