Una avioneta con seis pasajeros a bordo se estrelló el sábado por la tarde en el estado estadounidense de Nueva York, en el noreste del país, informó la Administración Federal de Aviación (FAA), sin que hayan trascendido por el momento más detalles sobre las causas o el número de víctimas mortales del accidente.
La aeronave accidentada, un avión un bimotor Mitsubishi modelo ‘MU-2B’, se estrelló en torno a las 12.15 horas (hora local) cerca de la localidad de Copake, cuando se dirigía al Aeropuerto del Condado de Columbia en Hudson, de acuerdo con información de la FAA dada a conocer por la cadena estadounidense ABC News.
Por el momento, la oficina del Sheriff del condado no se ha pronunciando respecto al incidente, por lo que se desconoce el número de víctimas mortales o la identidad de los pasajeros.
No obstante, en declaraciones recogidas por CBS News, la subsheriff Jacqueline Salvatore señaló que la condición llena de barro del lugar del accidente ha dificultado el acceso a la zona y adelantó que la investigación tomará al menos un par de días.
Copake se encuentra a unas 50 millas al sur de Albany, cerca de la frontera con Massachusetts.https://platform.twitter.com/embed/Tweet.html?dnt=false&embedId=twitter-widget-0&features=eyJ0ZndfdGltZWxpbmVfbGlzdCI6eyJidWNrZXQiOltdLCJ2ZXJzaW9uIjpudWxsfSwidGZ3X2ZvbGxvd2VyX2NvdW50X3N1bnNldCI6eyJidWNrZXQiOnRydWUsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfdHdlZXRfZWRpdF9iYWNrZW5kIjp7ImJ1Y2tldCI6Im9uIiwidmVyc2lvbiI6bnVsbH0sInRmd19yZWZzcmNfc2Vzc2lvbiI6eyJidWNrZXQiOiJvbiIsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfZm9zbnJfc29mdF9pbnRlcnZlbnRpb25zX2VuYWJsZWQiOnsiYnVja2V0Ijoib24iLCJ2ZXJzaW9uIjpudWxsfSwidGZ3X21peGVkX21lZGlhXzE1ODk3Ijp7ImJ1Y2tldCI6InRyZWF0bWVudCIsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfZXhwZXJpbWVudHNfY29va2llX2V4cGlyYXRpb24iOnsiYnVja2V0IjoxMjA5NjAwLCJ2ZXJzaW9uIjpudWxsfSwidGZ3X3Nob3dfYmlyZHdhdGNoX3Bpdm90c19lbmFibGVkIjp7ImJ1Y2tldCI6Im9uIiwidmVyc2lvbiI6bnVsbH0sInRmd19kdXBsaWNhdGVfc2NyaWJlc190b19zZXR0aW5ncyI6eyJidWNrZXQiOiJvbiIsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfdXNlX3Byb2ZpbGVfaW1hZ2Vfc2hhcGVfZW5hYmxlZCI6eyJidWNrZXQiOiJvbiIsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfdmlkZW9faGxzX2R5bmFtaWNfbWFuaWZlc3RzXzE1MDgyIjp7ImJ1Y2tldCI6InRydWVfYml0cmF0ZSIsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfbGVnYWN5X3RpbWVsaW5lX3N1bnNldCI6eyJidWNrZXQiOnRydWUsInZlcnNpb24iOm51bGx9LCJ0ZndfdHdlZXRfZWRpdF9mcm9udGVuZCI6eyJidWNrZXQiOiJvbiIsInZlcnNpb24iOm51bGx9fQ%3D%3D&frame=false&hideCard=false&hideThread=false&id=1911152524947583320&lang=es&origin=https%3A%2F%2Faristeguinoticias.com%2F130425%2Fmundo%2Funa-avioneta-con-seis-pasajeros-a-bordo-se-estrella-en-el-estado-de-nueva-york%2F&sessionId=dfd117a1590dfbc9dbadea3a1d76a30a6d56e672&siteScreenName=AristeguiOnline&theme=light&widgetsVersion=2615f7e52b7e0%3A1702314776716&width=550px
Por otra parte, continúa la investigación sobre el accidente de un helicóptero el pasado jueves que cayó a aguas del río Hudson, en el que fallecieron cinco turistas españoles y un piloto estadounidense. El sábado equipos de buzos recorrieron el área para tratar de recuperar partes de la aeronave y adelantar otras pesquisas.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), encargada de la investigación, detalló la víspera que desde el viernes han desplegado un equipo de 17 profesionales, que barajan varias hipótesis pero que “se quiere evitar la especulación” y ofrecerán más detalles próximamente.
Varias embarcaciones se mantenían movilizadas en la costa de Jersey City (Nueva Jersey), ciudad vecina de Nueva York y en cuyas aguas impactó la aeronave, según pudo constatar la agencia EFE el sábado a primera hora de la tarde.
Equipos de buzos siguen buscando en el Hudson, donde se cree aún quedan partes del helicóptero, entre ellas el rotor y el rotor de cola, sumergidos a aproximadamente 12 metros de profundidad. Estas operaciones continuarán este domingo.
A su vez, la NTSB detalló que sus investigadores han comenzado a evaluar el sistema de control de vuelo del aparato, que ningún sistema de aviónica a bordo de la aeronave registró información que pudiera utilizarse para la investigación y que sus funcionarios se han reunido ya con representantes de la empresa que brindaba el servicio para investigar a fondo sus operaciones.
La familia fallecida estaba conformada por los ejecutivos de Siemens Agustín Escobar y su esposa Mercè Camprubí, así como sus hijos de 10, 8 y 4 años. El piloto era Seankese ‘Sean’ Johnson, un militar afroamericano de 36 años.
Foto: EFE
La estrepitosa caída del helicóptero al agua, en la que se pudo ver cómo perdía partes de su fuselaje en el aire, se produjo en torno a las 15:15 hora local del jueves y provocó la movilización de los buzos del cuerpo de bomberos, así como de la Policía de Nueva York y de la vecina Nueva Jersey, que sacaron del río a las víctimas y a la aeronave siniestrada.
El sábado, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, y Joan Camprubí, hermano de Mercè, realizaron, junto a otras autoridades, una ofrenda floral en el cauce fluvial como homenaje a los fallecidos.
Adams y Camprubí exteriorizaron su dolor compartido en una comparecencia ante la prensa, pero no se aportaron nuevos detalles de la investigación.
El helicóptero despegó desde la parte baja de Manhattan en dirección al sur, antes de volar hacia el norte hasta el puente George Washington, y después volvió a dirigirse hacia el sur siguiendo la costa de Nueva Jersey, cuando perdió el control a la altura de la ciudad de Hoboken.
El alcalde de Jersey City, Steven Fulop, afirmó que el cuerpo principal de la aeronave se encuentra en las instalaciones del Cuerpo de Ingenieros del Ejército en Jersey City.
“Se discutió sobre tres teorías. Estaba el debate sobre un posible percance con pájaros, o con drones o algún fallo mecánico. Veremos qué sucede”, añadió Fulop, sin aclarar si estas teorías siguen siendo las principales en la investigación.
Además, la policía de Jersey City recuperó trozos de metal que llegaron el jueves a la costa de esta ciudad, junto con un chaleco salvavidas, un asiento y otras pertenencias.
También se están investigando los informes de testigos sobre bandadas de pájaros en el momento del accidente.
Johnson, el piloto que había avisado minutos antes que se estaba quedando sin combustible, tenía 788 horas de vuelo total, pero no se sabe cuántas en el helicóptero Bell.
El accidente ha despertado nuevamente un intenso debate sobre la regulación de la actividad de los llamados “vuelos no esenciales”, que incluyen a los helicópteros turísticos y a los “taxis aéreos” que permiten saltarse el engorroso tráfico de Manhattan para llegar más rápido al aeropuerto y a las playas más cercanas.
Este tráfico sumó el año pasado unos 80,000 vuelos sobre Manhattan, que fueron protagonizados por personas con alto poder adquisitivo, toda vez que cada vuelo cuesta, como mínimo, 250 dólares por persona y trayecto.
(Con información de Europa Press, EFE y Aristegui Noticias)