Miguel Ángel Yunes Márquez, senador por el Partido Acción Nacional (PAN), solicitó licencia al Senado de la República alegando problemas de salud.
La petición fue realizada a través de una carta dirigida al presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, en la que Yunes expuso que desde hace varios meses ha enfrentado complicaciones de salud que le impiden cumplir con sus responsabilidades de manera efectiva.
En el comunicado, el senador garantizó que presentará los certificados médicos correspondientes para sustentar su solicitud de licencia, dejando abierta la posibilidad de reincorporarse al cargo una vez que termine su tratamiento médico.
Además, solicitó que su suplente, quien es su padre, Miguel Ángel Yunes Linares, asuma temporalmente la representación en la Cámara de Senadores.
La carta de Yunes fue leída durante la sesión ordinaria del Senado, en el marco de la discusión de la reforma judicial, lo que generó diversas reacciones por parte de sus compañeros de partido y de la oposición.
El líder nacional del PAN, Marko Cortés, alzó la voz en defensa de Yunes Márquez, sugiriendo que la decisión del senador pudo haber sido producto de presiones externas más allá de los problemas de salud alegados.
En su discurso, Cortés señaló que Yunes y su familia han sido objeto de persecución por parte de la fiscalía del estado de Veracruz, encabezada por el gobernador Cuitláhuac García, mencionando investigaciones supuestamente fabricadas contra varios miembros de la familia Yunes, incluyendo la madre, los hermanos y el propio senador.
Durante su intervención en la Cámara de Senadores, Marko Cortés calificó la situación como una presión política ejercida desde el gobierno de Veracruz y otros sectores vinculados a Morena, afirmando que la solicitud de licencia de Yunes Márquez es una muestra más de cómo, según él, se ha utilizado el aparato de justicia para amedrentar a la oposición.
Según Cortés, estas acciones estarían dirigidas a desarticular el liderazgo de Yunes Márquez, quien, según sus palabras, ha sido un firme opositor del régimen autoritario en Veracruz y de las acciones del actual gobernador.
El líder panista criticó lo que calificó como un intento de obtener mayorías legislativas por medios indebidos, sugiriendo que se ha presionado a varios legisladores de la oposición para que cambien su postura en votaciones clave.
El discurso de Cortés no se limitó a la situación personal de Yunes Márquez, sino que extendió sus críticas al actuar de la mayoría legislativa en el Senado, integrada por Morena y sus aliados, acusándolos de utilizar las fiscalías y recursos públicos para presionar a legisladores de la oposición con el fin de obtener votos para reformas constitucionales.
Según Cortés, este tipo de acciones representan una traición al mandato popular, ya que los ciudadanos no votaron para otorgar a Morena una mayoría calificada, por lo que afirmó que la búsqueda de estos votos por otros medios no refleja la voluntad del pueblo.
El senador Cortés, en su intervención, expresó su esperanza de que Yunes Márquez reconsidere su decisión, señalando que aún estaba a tiempo de revertir su solicitud antes de que esta fuera sometida a votación en el pleno.
Durante su discurso, hizo un llamado a Yunes Márquez para que no ceda ante las presiones y continúe defendiendo los principios por los cuales fue electo, recordando su papel como opositor al gobierno de Veracruz y las acciones que, según Cortés, han buscado desmantelar su liderazgo en el estado.