Vladímir Putin se comprometió el jueves a cumplir los objetivos de Moscú en Ucrania y advirtió a Occidente en contra de una mayor implicación en la guerra alegando que eso podría provocar un conflicto nuclear en el mundo
El presidente de Rusia lanzó la advertencia durante su discurso sobre el estado de la nación, en vísperas de las elecciones de marzo.
Subrayó su disposición a subir las apuestas en su pulso con Occidente para proteger los avances logrados por las fuerzas rusas en el país vecino.
En una aparente referencia a las palabras de Emmanuel Macron, a principios de semana acerca de que no debería “descartarse” un posible despliegue de tropas terrestres occidentales en Ucrania, Putin advirtió que eso tendría “trágicas” consecuencias para quienes decidan hacerlo.
Destacó que mientras acusaban al Kremlin de planear ataques contra los socios de la OTAN en Europa, los aliados occidentales estaban “seleccionando objetivos para atacar nuestro territorio” y “hablando sobre la posibilidad de enviar un contingente a Ucrania”.
“Recordamos la suerte de aquellos que enviaron sus contingentes de tropas al territorio de nuestro país.
Ahora, las consecuencias para los posibles invasores serán mucho más trágicas”, afirmó Putin.
En su discurso calificó a los líderes occidentales de imprudentes e irresponsables y deberían tener en cuenta que “nosotros también tenemos armas que pueden atacar objetivos en su territorio, y que lo que ahora están sugiriendo y con lo que están amedrentando al mundo, plantea la amenaza real de un conflicto nuclear que supondrá la destrucción de nuestra civilización”.
Puntualizó que las fuerzas nucleares rusas están “totalmente preparadas” y que el ejército ya desplegó nuevas y potentes armas, algunas de ellas probadas en los campos de batalla en Ucrania.
Además, dijo que entre ellas estaba el nuevo misil balístico intercontinental Sarmat, que entró en servicio con las fuerzas nucleares, y también el misil de crucero de propulsión atómica Burevestnik y del dron nuclear de propulsión atómica Poseidon.
Putin calificó las afirmaciones de los líderes occidentales acerca de la amenaza de un ataque ruso a los aliados de la OTAN en Europa de “desvaríos” y volvió a rechazar la afirmación de Washington de que Moscú está valorando el despliegue de armas nucleares espaciales.
Afirma que formaban parte de una estrategia para llevar a Rusia a conversaciones sobre control de armas nucleares según los términos de la Casa Blanca, aunque Washington continúa con sus esfuerzos para propiciar una “derrota estratégica” a Moscú en Ucrania.
“En vísperas de las elecciones estadounidenses, solo quienes pueden mostrar a sus ciudadanos, así como a los demás, que siguen gobernando el mundo. No funcionará”.
En su discurso, dijo que Rusia estaba “defendiendo su soberanía y seguridad y protegiendo a nuestros compatriotas” en Ucrania y apuntó que sus tropas tienen ventaja en la guerra.
También reafirmó que Occidente estaba empeñado en destruir a Rusia porque “necesitan un espacio dependiente, menguante y moribundo en el lugar de Rusia para poder hacer lo que quieran”.
Con información de AP