Antonio Sosa | El Sol de Tampico
Un grupo de venezolanos deportados se manifestaron este viernes en el puente Matamoros y Brownsville, obligando al cierre del paso internacional entre Tamaulipas y Texas.
Con cadenas y las manos pintadas de blanco avanzaron hacia el puerto fronterizo, culpando en su avance al gobernador texano Greg Abbot de la expulsión de Estados Unidos
El consulado de Estados Unidos en Matamoros dio a conocer que “el Puente Gateway entre Matamoros y Brownsville ha sido cerrado debido a una protesta”.
Indicó que el gobierno de Estados Unidos “ha instruido a los empleados que eviten el área hasta nuevo aviso. Los ciudadanos deben evitar el área, monitorear los medios de comunicación para obtener actualizaciones y notificar a amigos y familiares sobre su seguridad”
De igual manera, Caminos y Puentes Federales (Capufe) dio a conocer el cierre de este cruce internacional, precisando que se interrumpe la circulación en dirección a Estados Unidos por presencia de manifestantes.
Venezolanos encabezan el movimiento
Se trata de un grupo de al menos medio centenar de deportados, en su mayoría venezolanos, quienes encabezaron la manifestación.
Con las manos pintadas de blanco, cinta en la boca, cadenas en cuello y manos avanzaron por calles de esta ciudad del norte de Tamaulipas para apostarse en el puente.
La comunidad venezolana salió desde la casa del migrante San Juan diego y San Francisco de Asís A. C. en Matamoros, donde permanecen tras ser expulsados de Estados Unidos.
Los venezolanos aseguraron que han migrado por necesidad, ante las malas condiciones que imperan en su tierra.
“Tengo meses viajando, he pasado hambre, frío y dormimos en la calle, la gente nos ayuda y nos alimenta”, expresó Rodolfo Eduardo Lira, migrante de Venezuela.
Apenas avanzaban los venezolanos al Puente Nuevo y las autoridades de Protección Fronteriza optaron por cerrar el acceso internacional para evitar que los migrantes cruzaran a la fuerza.
Activistas de ayuda a migrantes estiman que en el cierre de este 2022 se registre un aumento en la cantidad de migrantes llegados desde el sur y deportados de Estados Unidos a México, alertando sobre que se agudice la crisis humanitaria en esta región.
Los deportados venezolanos se mantienen en el puente Matamoros-Brownsville por lo que este sigue cerrado, generando largas filas de vehículos que intentan transitar entre México y Estados Unidos.
Entra en vigor nuevo plan migratorio de EU
El miércoles pasado, Estados Unidos anunció nuevas medidas para controlar la migración venezolana: un programa que da estatus legal por dos años a quienes llegan en avión y la expulsión inmediata de la mayoría de quienes crucen la frontera por México.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) informó de la creación de un nuevo alivio migratorio para los venezolanos, similar al que ya existe para los ciudadanos de Ucrania, que concede un estatus temporal de dos años a quienes dispongan de un patrocinador en EU.
En paralelo, el DHS devolverá a México a la mayoría de venezolanos que sean interceptados después de atravesar la frontera sur; las expulsiones serán llevadas a cabo bajo el Título 42, una normativa de salud pública impuesta al inicio de la pandemia y heredada de la Administración del expresidente Donald Trump.
“Quienes intentan cruzar la frontera sur de EU de manera ilegal serán devueltos a México y no podrán aplicar a este programa en el futuro”, señaló el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en un comunicado.
En virtud de este programa migratorio, del que están excluidos los deportados de EU en los últimos cinco años o las personas que hayan entrado a Panamá o México de manera irregular, el Gobierno estadounidense aceptará en un principio a 24 mil personas. Tampoco serán aceptadas las personas que tengan una residencia permanente o nacionalidad de otro país que no sea Venezuela.
Para aplicar al programa, los venezolanos interesados deberán demostrar que tienen un patrocinador que tenga un estatus migratorio legal en EU y que pueda acreditar que tiene los recursos financieros por el periodo de tiempo que los migrantes vayan a residir en el país.
Además, los beneficiarios deberán pasar una evaluación de “seguridad nacional y seguridad pública”, indicó DHS.
México aceptó a cambio de visas
Como parte del acuerdo para que México reciba a 24 mil venezolanos deportados, la administración de Joe Biden aceptó otorgar 65 mil visas conocidas como H2-B para trabajadores no agrícolas, quienes tendrían que llegar a Estados Unidos en un vuelo comercial.
De las 65 mil visas disponibles 20 mil de ellas serán facilitadas para personas de Centroamérica y Haití, además de que ambos países buscarán generar oportunidades de trabajo directamente a las comunidades de origen de las personas migrantes. Se desconoce hasta ahora si las 21 mil visas restantes sean para trabajadores mexicanos o para personas migrantes de otros países.
El anuncio de EU llega en medio de un aumento de la llegada de venezolanos a la frontera con México. Entre octubre de 2021 y agosto de este año, más de 150 mil venezolanos han sido arrestados en la frontera sur de EU, en comparación con los 50 mil 499 en el mismo periodo del año pasado.
Solo en agosto, unos 25 mil venezolanos fueron interceptados por autoridades estadounidenses en la frontera, de acuerdo con datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
A diferencia del programa para los venezolanos, EE.UU. no estableció un número máximo de personas que pueden recibir el alivio migratorio para ucranianos, que fue anunciado en abril y del cual se han beneficiado unas 65.000 personas, según los últimos datos disponibles.
Más de 6,1 millones de venezolanos han salido de su país, en la que es la segunda crisis migratoria más grande del mundo, superada sola por la de Siria, de acuerdo con la organización Refugees International. EFE
Con Información Jaime Jiménez y EFE