El fallecido líder y vocalista de la banda de rock argentina Los Enanitos Verdes, vivió 15 años en Hermosillo, Sonora.
Nacido en Mendoza, Argentina, Horacio Eduardo Cantero Hernández, más conocido como “Marciano”, cambió su país de residencia a México a inicios de la década de los dos mil; específicamente a Hermosillo, Sonora.
Marciano llegó a vivir a Hermosillo en 2003, cuando decidió iniciar una relación con una sonorense. Desde entonces, se volvió común para los habitantes de la ciudad el toparse con el cantante en situaciones y lugares cotidianos como supermercados, tiendas de auto servicio y bares locales.
“Hermosillo es mi lugar favorito en la tierra, así te lo digo”, expresó Marciano Cantero en entrevista con Proyecto Puente el pasado mayo cuando promocionaba el concierto de Enanitos Verdes en el Hipódromo de Hermosillo.
“Yo tengo un amor por Sonora que viene de mucho antes de que yo haya pisado Sonora. Fue a través de las lecturas de los libros de (Carlos) Castaneda que hablaban de los Yaquis”, declaró el fallecido intérprete de “Lamento boliviano”.
Marciano también contó como fue la primera vez que visitó Hermosillo: “Íbamos a tocar con Los Enanitos a Hermosillo, estaba esperando detrás del escenario y pensaba, te lo juro fue un sentimiento tan real, ‘pero que a gusto me siente esta noche’, no lo podía creer”, dijo el músico argentino, quien reveló que esa sensación le “pasó varias veces hasta que me quedé (a vivir) en Hermosillo”.
Marciano Cantero, quien dejó de vivir en Sonora en 2017 cuando regresó a Mendoza, Argentina, también habló de sus visitas recurrentes a “La ciudad el Sol”, ya que para él regresar a Hermosillo “es como decir ‘estoy en tierra santa’. Es inexplicable, pero es real”.
El líder y fundador de Los Enanitos Verdes finalizó la entrevista declarando: “Yo soy parte de Hermosillo y Hermosillo es parte de mi. Es innegable e indudable, de la misma manera que tampoco puedo negar mi patria mamma que es mi tierra natal (Argentina)”.
Marciano Cantero murió el 8 de septiembre de 2022 en Mendoza, Argentina, a los 62 años tras complicaciones renales por una cirugía en la que fueron extirpados un riñón, parte del bazo y un testículo.