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Sergio Checo Pérez sigue teniendo problemas con el RB18 de Red Bull Racing y no se le ve cómodo al volante con su monoplaza. Esta situación hizo que en la Q2 del Gran Premio de Hungría de F1 el tapatío quedara eliminado por 71 milésimas.
Checo se quedó muy cerca de pasar a la Q3, sin embargo, sus esfuerzos no fueron suficientes y en la carrera de este domingo el mexicano arrancará undécimo, tratando de poder exprimir lo mejor de su carro.
Información de La Razón
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