Las víctimas tras el derrumbe de una parte del glaciar Marmolada, en los Alpes italianos, aumentaron a nueve, después de que el miércoles se localizaron los cadáveres de dos cuerpos sin vida, según informaron las autoridades locales.
Del total de fallecidos, cuatro ya fueron reconocidos por familiares, explicó el presidente de la provincia autónoma de Trento (norte), Maurizio Fugatti.
Los desaparecidos oficialmente son tres y las labores de búsqueda continúan por aire, mediante drones y helicópteros, por el peligro que hay por tierra ante el riesgo de nuevos derrumbes.
En cualquier caso, Fugatti pidió tomar “con prudencia” estos datos pues el balance sigue siendo provisional y en las últimas horas se ha localizado a montañistas y personas que se creían desaparecidos, pero en realidad estaban a salvo en otros lugares.
Fugatti, confirmando el hallazgo de estas dos nuevas víctimas, disipó la duda de si los nuevos restos encontrados pertenecían a personas ya confirmadas como muertas o a otras, ya que los cuerpos sufrieron daños importantes.
Los heridos, de diversa consideración, son siete, de los que cuatro están hospitalizados en Trento y tres en la región del Veneto.
La tragedia ocurrió el pasado domingo en los montes alpinos Dolomitas, cuando una porción del glaciar de la Marmolada, de 200 metros de longitud, 60 de ancho y 30 de grosor, se desprendió montaña abajo.
Los testigos explicaron que primero hubo un estruendo ensordecedor y luego una especie de avalancha de nieve, hielo y roca que arrasó con todo y aseguran que nunca había pasado nada así.
Los equipos de rescate consideran difícil encontrar a todos los desaparecidos aún reclamados por sus familias, ya que la masa de hielo y rocas que colapsó equivale a dos campos de fútbol de 30 metros de grosor.
Pero hoy el presidente del Véneto, Luca Zaia, consideró un “deber moral” devolver los cuerpos a los familiares.
(Con información de EFE y Reuters)