BEIJING, 31 de mayo (AP).— Las autoridades de Shanghái señalaron que el miércoles se tomarán medidas importantes para la reapertura de la mayor ciudad de China tras un confinamiento de dos meses por la COVID-19, que ha asfixiado a la economía nacional y encerró a millones de personas en sus casas.
Se reanudará el servicio de autobús y metro, así como las conexiones ferroviarias básicas con el resto de China, explicó el martes el teniente de alcalde de la ciudad, Zong Ming, en su conferencia de prensa diaria sobre el brote de coronavirus.
Las escuelas abrirán parcialmente aunque la asistencia presencial será voluntaria, y los centros comerciales, supermercados, tiendas de alimentación y farmacias recuperarán la actividad de forma gradual con un aforo de no más del 75% de su capacidad. Los cines y gimnasios seguirán cerrados.
Las autoridades, que habían establecido el 1 de junio como plazo para la reapertura a principios de mayo, parecían listas a acelerar el alivio gradual de los últimos días. Algunos centros comerciales y mercados ya funcionan y algunos residentes han recibido pases que les permiten salir unas cuantas horas. En al menos algunos chats, el cinismo sobre la lentitud y la inminencia de la reapertura dejó paso el martes al entusiasmo sobre la posibilidad de poder volver a moverse libremente por la ciudad por primera vez desde finales de marzo.
Shanghái registró 29 nuevos positivos el lunes, continuando con su declive constante desde los más de 20.000 diarios registrados en abril. Li Qiang, el máximo responsable del gobernante Partido Comunista en Shanghái, afirmó en una reunión el lunes que la ciudad ha realizado importantes avances contra el brote gracias a una lucha continua.
El éxito tuvo un precio. Las autoridades impusieron un confinamiento asfixiante en toda la ciudad cumpliendo con la política “cero COVID” estatal, que busca sofocar cualquier brote con pruebas masivas y aislamiento en instalaciones centralizadas para cualquier infectado.
Las escuelas reabrirán para los dos últimos cursos de la escuela secundaria y para el tercero de la primaria, pero los alumnos pueden decidir su asisten en persona. Otros cursos y los jardines de infantes permanecerán cerrados.
Beijing, la capital del país, alivió aún más las restricciones el martes en algunos distritos. La ciudad impuso cierros estrictos, pero no para toda la urbe, debido a un brote mucho más pequeño, que parece haberse disipado. Beijing registró apenas 18 nuevos casos el lunes.