Como señalábamos en nuestro artículo anterior, las colillas de cigarro son una problemática ambiental alarmante, por las sustancias toxicas que contiene el filtro y estas al estar en contacto con el agua o tierra se filtran y dañan todo a su paso, sin embargo, ahora tenemos una nueva amenaza que enfrenta nuestro medio ambiente: los cartuchos plásticos de los cigarros electrónicos o vapes y los químicos tóxicos que contienen las pilas.
Los cigarros electrónicos o vapes son dañinos para nuestro medio ambiente ya que contienen tres tipos de desechos en uno; desechos plásticos, desechos peligrosos y desechos electrónicos. Lo peligroso de esto es que ya estamos en una alerta por la gran cantidad de residuos que generamos y no le damos un buen proceso de gestión y ahora con esto, subirá la gran contaminación por residuos electrónicos y peligrosos.
El consumo de este tipo de cigarrillos aumentó en los últimos años; de acuerdo con Euromonitor Internacional, se estima que se tienen alrededor de 55 millones de consumidores actualmente a nivel mundial. Por otro lado, La Encuesta Nacional de consumo de drogas, alcohol y tabaco (2016), señala que en México existen 160 mil adolescentes que consumen de manera habitual este cigarro electrónico; el 6.5% de la población entre 12 y 17 años admitió haber probado el cigarro electrónico.
Con estas cifras tenemos un gran desafío enfrente, ya que todavía no podemos regular la contaminación que generan las colillas de cigarro y ahora tenemos un problema con los desechos de estos vapes; ya que la eliminación de los desechos electrónicos, es un gran desafío debido a los diferentes tipos de sustancias químicas y materiales que se encuentran en estos productos. Los vapes presentan al menos dos problemas, ya que sus vaporizadores tienen una placa de circuito, que puede contener plásticos y metales pesados y la otra es las baterías de iones de litio. Además, estos accesorios y pilas que contienen los vapes son arrojados si bien nos va, en los botes de basura normal y otros los vemos en nuestras calles, parques, playas, dejando una terrible contaminación.
La contaminación por baterías puede durar hasta 500 años y mientras esto ocurre, las baterías que contiene los vapes van a liberar litio y puede una sola pila, llegar a contaminar alrededor de 600 mil litros de agua.
Lo preocupante es que cada día los jóvenes compran con mayor facilidad estos productos, aun cuando estos fueron prohibidos por el Presidente de la republica Andrés Manuel López Obrador, en el decreto publicado en Diario Oficial de la Federación en febrero del 2020, en el cual señala lo siguiente:
Es importante resaltar el inminente peligro que representan los citados dispositivos, toda vez que generan vapor o aerosol y compuestos químicos producidos por el calentamiento de los componentes del líquido, una mezcla de propilenglicol, glicerina y aromatizante o, en su caso, nicotina y tabaco, que al ser inhaladas ingresan directamente al sistema respiratorio con una afectación más amplia que otras sustancias, tanto en vías aéreas de conducción como en zonas alveolares, debido al pequeño tamaño de las partículas generadas (100-160 nm);
Que se ha reportado que la utilización de estos dispositivos genera inflamación de las vías respiratorias, el incremento de glóbulos blancos en sangre, así como opacidades bilaterales pulmonares (manchas en el pulmón), baja oxigenación de la sangre o inclusive falla respiratoria, además de un aumento de la sensibilidad de las células de las vías respiratorias a infecciones virales. Se prevé que su uso a largo plazo aumente el riesgo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica y cáncer de pulmón. Hasta el 4 de febrero de 2020 el CDC ha registrado 2,758 pacientes hospitalizados (de todos los estados de EE.UU) con enfermedad pulmonar grave, incluyendo 64 defunciones (provenientes de 27 estados de dicho país), asociados al uso de dispositivos de vapeo.
Como vemos no solo están generando una terrible contaminación en nuestro medio ambiente, si no también, son igual de dañinos para nuestra salud. Es de suma importancia, empezar a trabajar en cuanto al desecho que se está generando en cuanto a los vapeadores como con las colillas de cigarro, estos residuos son altamente contaminantes y peligrosos para nuestro planeta.
Pamela Ibarra Dávila
Docente y Presidenta de Cultura Verde Amor por el Planeta A.C
Twitter: culturaverdeac