La adolescencia es una etapa de confrontaciones. Como adultos, es importante recordar y reconocer que nosotros también pasamos por esa etapa alguna vez. La buena noticia es que hoy tenemos más información y más herramientas a nuestro alcance. Cuando buscas definir límites con los adolescentes en tu familia, ser empática es una habilidad clave.
Establecer límites con los adolescentes es un paso importante para ayudarles a entender que sus acciones tienen consecuencias. Nos permiten establecer acuerdos o contratos como mecanismos para que vayan aprendiendo acerca de la responsabilidad, la comunicación y evitar conflictos. Como adultos podemos llegar a sentir que estamos en control de la situación y hacia los adolescentes los límites nos permiten hacerles saber que son importantes para nosotros, nos preocupa cómo están inclusive cuando no están con nosotros, y también es una manera de crear una estructura para que ellos puedan sentirse autónomos.
Al momento de definir límites con los adolescentes te recomiendo que lo hagas con ellos, tomando en cuenta su opinión. No quiere decir que ellos van a definir las reglas pero si es mas probable que las cumplas si son parte de la elaboración de éstas. Cuando evitamos ser autoritarios, podemos crear vínculos de confianza con ellos. En el momento en que intentes definir límites recuerda mantener un tono amigable durante la conversación. Revisa con el o la adolescente lo que le preocupa o cómo se siente respecto a esos límites.
Sé clara(o) y precisa(o) para asegurar que ambas partes entendieron el mensaje y evitar malentendidos. En caso de que tengan desacuerdos, aprendan a negociar en conjunto. Define tus no-negociables y sé firme haciendo énfasis en por qué es importante el límite que intentas establecer. Por último, habla de las consecuencias una vez que se definan los límites. Tener las consecuencias claras permitirá a ambas partes administrar mejor sus respectivas expectativas.
Ana Marcela Gándara