Un joven gay fue torturado, quemado y asesinado en el interior de un taller de herrería en Cancún, Quintana Roo, luego de revelar durante una fiesta que vivía con VIH.
El crimen de odio ocurrió el pasado sábado 5 de junio en la zona de Rancho Viejo.
Presuntamente, la víctima habría tenido relaciones sexuales con otra de las personas presentes en la fiesta.
Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE) no ha emitido información oficial al respecto.
La Secretaría de Gobernación y el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) solicitaron una investigación con perspectiva antidiscriminatoria y exhortaron al gobierno de Carlos Manuel Joaquín González a tomar las medidas necesarias contra la violencia a personas LGBTTTI+.
Colectivos de la comunidad LGBTTTIQA+ exigieron respuestas a la Fiscalía estatal y demás autoridades correspondientes.
En su pronunciamiento, Resilientxs, Playa Pride y REDefine Quintana Roo, entre otros, manifestaron su preocupación por la situación de violencia que atraviesan.
Recordaron que, recientemente, se han reportado diversos hechos que vulneran la seguridad y discriminan a la comunidad.
Por ejemplo, el abuso policial del que fueron víctimas jóvenes gay en Playa del Carmen y Tulum, acusados de alterar el orden por besarse en público; o la discriminación que vivieron dos jóvenes gay por parte del personal de la Secretaría de Salud del estado al intentar donar sangre.
Edwin Reyes, vocero de Resilientxs, expuso que la sociedad no puede tolerar la violencia extrema y asesinatos por prejuicios sobre la sexualidad.
Agregó que en la entidad no hay políticas destinadas a prevenir y erradicar la violencia hacia las personas LGBT y tampoco leyes que castiguen los crímenes de odio.
La Comisión de Derechos Humanos de Quintana Roo (Cdhqroo) lamentó los hechos y pidió a las autoridades actuar con perspectiva de género y en apego a derecho.