El jueves pasado, el meteorólogo James Spann se encontraba en medio de una transmisión en vivo sobre la mortífera ‘supercélula’ de tornados en el sur de EE.UU., cuando descubrió que el fenómeno natural había afectado su casa.
El principal meteorólogo de la sucursal de ABC en Birmingham, una ciudad en la región centro-norte de Alabama, se tomó unos segundos para escribir a su mujer y asegurarse de que estaba en el refugio, tras alertar volvió al aire.
“La razón por la que tuve que salir fue que tuvimos daños importantes en mi casa. Tenía que estar seguro que mi esposa está bien, pero el tornado pasó por allí y no es bueno, es malo. Es malo”, explicó Spann cuando regresó a la transmisión.
Más tarde, Spann compartió una actualización en su cuenta de Twitter, señalando que el tornado derribó muchos árboles en su jardín, pero la casa quedó “intacta”. Además, agregó que su esposa había logrado esconderse en el refugio y se encontraba bien.
“Muchas gracias a todos los que me han contactado […] Mi esposa estaba en casa cuando sucedió, pero recibió la advertencia, estaba en el refugio de nuestra casa y está bien”, escribió el meteorólogo, pidiendo a sus 53.000 seguidores a que ayuden a aquellos “que tienen daños mucho más graves”.
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