La policía de la CDMX detuvo este martes a una pareja que ofrecía productos como cubrebocas y sanitizantes, pero que en realidad buscaban víctimas para secuestrarlos o extorsionarlos.
Cuando los compradores trataban de concretar la negociación eran retenidos en una oficina ubicada en calles de la alcaldía de Miguel Hidalgo.
En uno de los últimos casos denunciados, la víctima trataba de comprar 400 mil cubrebocas, pero al llegar a las instalaciones de la supuesta empresa fue retenida y solicitaron una importante suma de dinero para poder liberarla.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que luego de recibir denuncias sobre este modus operandi, se estableció un operativo para detener al hombre y la mujer, ambos de 27 años.
Luego de varias denuncias ciudadanas que referían el modus operandi en el que varias personas ofertaban productos de sanitización al mayoreo y que al momento de concretar la compra-venta retenían a los clientes en un departamento adaptado como oficina y para dejarlos en libertad les exigían altas sumas de dinero, a través de transacciones bancarias, los policías iniciaron vigilancias fijas y móviles en el lugar”, detalló.
Una vez con las investigaciones fue la captura de los imputados, durante una revisión se les encontraron 20 envoltorios de cocaína, así como cinco equipos de telefonía celular de diferentes marcas y modelos.
Además, los imputados podrían estar relacionados con al menos tres casos de extorsión bajo el mismo modus operandi.
La mujer, quien se encargaba de rentar las oficinas para montar empresas ficticias, cuenta con una detención anterior en la Ciudad de México, en 2019, por el delito de robo a negocio.
El líder de la pareja sería un sujeto procesado en el Estado de México por el delito de extorsión y que al parecer es originario de Michoacán.
En medio de la pandemia, han surgido diversos delitos cuyos perpetradores se aprovechan de la situación límite que vive la población en general en términos de vida cotidiana, como al realizar trámites, o de casos de enfermos de covid-19.
El 1 de octubre Excélsior publicó una nueva modalidad de extorsión telefónica descubierta por la SSC con la cual los delincuentes se hacen pasar por pacientes convalecientes a través de llamadas telefónicas, en las cuales aseguran ser supuesto familiares para pedir depósitos bancarios de entre diez mil y 30 mil.
Los extorsionadores también se hacen pasar por vendedores de productos sanitarios, como “arcos sanitizantes, cubrebocas y gel desinfectante cuando en las llamadas telefónicas contestan empleados domésticos y de oficina, a los que llegan a pedir más de 30 mil pesos”.