LOS ÁNGELES (AP) — Larry King, quien entrevistó presidentes, estrellas de cine y gente ordinaria durante medio siglo en los medios de comunicación electrónica, falleció a los 87 años.
Ora Media, el estudio y la cadena que cofundó, tuiteó que King murió el sábado por la mañana en el Centro Médico Cedars-Sinai en Los Ángeles. No se infirmó ninguna causa de muerte, pero CNN había informado anteriormente que fue hospitalizado con COVID-19.
King fue una figura perene de la televisión nocturna en CNN de 1985 a 2010. Ganó dos premios Peabody, pero nunca se dio aires de intelectual. Prefería preguntar a los presidentes lo que les gustaba de sus trabajos en vez de política exterior. Recibió a todos, desde el Dalai Lama hasta Elizabeth Taylor, pasando por Mijaíl Gorbachov, Barack Obama, Bill Gates y Lady Gaga.
Con sus entrevistas a celebridades, líderes políticos y análisis de temas, King fue algo más que una perdurable personalidad de los medios. Se diferenció por la curiosidad que llevaba a cada entrevista, ya fuera cuestionando a la mujer víctima de un ataque conocida como “Central Park Jogger” o al multimillonario industrial Ross Perot, quien sacudió la contienda presidencial en 1992 al anunciar su candidatura en el programa de King.
En sus primeros años, “Larry King Live” se hacía en Washington, D.C., lo que le dio cierta seriedad al programa, al igual que a King. Él era la persona indicada para que los peces gordos a su alrededor pudieran llegar a su público, y lo hicieron, dándole al programa prestigio como un sitio en el que las cosas sucedían, donde se hacían noticias.
King realizó cerca de 50 mil entrevistas al aíre. En 1995 presidió una cumbre sobre Oriente Medio con el presidente de la Organización para la Liberación de Palestina Yasser Arafat, el rey Hussein de Jordania y el primer ministro israelí Yitzhak Rabin.
Sus programas solían presentar primicias sobre celebridades, especialmente después de que se reubicó en Los Ángeles, incluyendo a Paris Hilton hablando sobre su paso por la prisión en 2007 y los familiares y amigos de Michael Jackson hablando sobre su muerte en 2009.
King presumía que nunca se preparaba demasiado para una entrevista. Su estilo de evitar la confrontación relajaba a sus invitados y hacía que él fuera una persona cercana con su audiencia.
“No pretendo saberlo todo”, dijo en una entrevista con The Associated Press en 1995. “Nada de ‘qué sucede en Ginebra o con Cuba?’ Le pregunto: ‘señor presidente, ¿que no le gusta sobre su trabajo?’ o `¿Cuál es el error más grande que ha cometido?′ Eso es fascinante”.