Los altos niveles de violencia que enfrentan los productores agrícolas en México ya provocan incrementos de entre 10 y 20 por ciento en el precio de los alimentos, alertó este martes la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), tras el homicidio del líder limonero Bernardo Bravo, representante del sector agrícola nacional.
A través de un comunicado, la Concamin lamentó el asesinato y advirtió que la inseguridad en el campo está afectando directamente la productividad y los costos de los productos básicos.
“Este hecho lamentable enluta a la comunidad productiva y recuerda la urgencia de garantizar condiciones de seguridad para quienes contribuyen al desarrollo económico del país”, señaló el organismo.
La Confederación hizo un llamado a fortalecer la colaboración entre autoridades y sectores productivos para proteger la integridad de quienes trabajan en la cadena agroalimentaria, y reconoció la labor de las autoridades por la detención del presunto autor intelectual del crimen.
Por su parte, el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) también condenó el asesinato de Bravo y expresó su solidaridad con los familiares, amigos y productores afectados por la creciente violencia en el sector agroalimentario.
“El crimen organizado, la extorsión, las amenazas y los asesinatos no pueden seguir condicionando la actividad de quienes trabajan la tierra todos los días. La violencia e inseguridad no sólo amenazan a los productores, sino también a la seguridad alimentaria del país”, indicó el CNA.
El Consejo señaló que el aumento en los costos de diversos productos agrícolas responde, en parte, a pagos de extorsión exigidos por grupos criminales, lo que ha vuelto “insostenible” la situación en varias regiones del país.
“El CNA exhorta a las autoridades de los tres órdenes de gobierno a implementar, con urgencia y de manera coordinada, una estrategia que permita frenar la violencia e impunidad que amenaza la estabilidad del campo mexicano”, agregó.
Con información de Milenio