Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró este martes que México no ha aceptado ser un país tercero para recibir migrantes de otras nacionalidades deportados desde Estados Unidos, en respuesta a recientes decisiones del Gobierno estadounidense encabezado por Donald Trump.
“No hemos aceptado ser país tercero”, afirmó la mandataria durante su conferencia matutina en Palacio Nacional.
Añadió que, en caso de que un migrante sea trasladado a territorio mexicano, “tenemos que recibirlo y enviarlo, si es el deseo de esta persona, a su país de origen”.
La declaración de Sheinbaum ocurre tras la resolución de la Corte Suprema de Estados Unidos, que esta semana autorizó al Gobierno estadounidense a aplicar deportaciones rápidas y enviar migrantes a países terceros, sin otorgarles derecho a un proceso migratorio completo.
La presidenta explicó que Estados Unidos mantiene acuerdos bilaterales con casi todos los países para repatriar directamente a sus ciudadanos sin necesidad de transitar por México.
Sin embargo, destacó que, por razones humanitarias, México puede recibir a personas extranjeras temporalmente si así lo requieren, y facilitar su retorno a sus países de origen.
Desde el pasado 20 de enero, día en que Trump asumió nuevamente la presidencia, México ha recibido 65 mil 475 personas repatriadas desde Estados Unidos. De ese total, 59 mil 747 son ciudadanos mexicanos y 5 mil 728 son extranjeros.
El Gobierno de Trump ha intensificado su política migratoria, impulsando deportaciones masivas con el objetivo de expulsar a más de 11 millones de migrantes indocumentados que residen en Estados Unidos, una de sus principales promesas de campaña.
Diversas organizaciones defensoras de derechos humanos y expertos en leyes han condenado estas acciones, acusando al Ejecutivo estadounidense de violar el derecho al debido proceso de los migrantes deportados.