Navojoa, Sonora.- Lombardo Ríos Ramírez fue elegido por la historia para narrar y exponer sucesos que explican la evolución del ser humano, así es como lo catalogan algunas personas al conocer su trayectoria.
En 78 años de vida, el profesor Lombardo ha escrito 13 libros y fundado tres museos en Navojoa.
El primero fue Hu Tezzo en el patio de su casa, de ahí el Museo Regional del Mayo, el cual lleva su nombre, y un museo ecoturístico en Tehuelibampo.
Por más de seis décadas se dedicó a la docencia, donde compartió su conocimiento a niños de primaria, pero también a jóvenes de secundaria, preparatoria y universitarios.
2 DE OCTUBRE DE 1961: EL INICIO
Esa fecha marcó la vida de Lombardo, pues a sus 17 años dio su primera clase frente a un grupo de niños de una invasión de Cajeme, que ahora es la colonia Las Cortinas.
“Al terminar mi tercer año de secundaria, los padres de familia ya habían empezado a hacer una escuela con cartones y tablitas, y fueron con mi señor padre y le dijeron que querían que yo fuera ayudarles a dar clases porque había terminado mi tercer año de secundaria…
Yo me fui a esconder y mi papá fue por mí y me dijo: ‘sé que te gusta y vienen por ti, ¿qué dices?”, relató, y aseguró que con mucho temor aceptó la invitación, y fue así como inició su vida docente a los 17 años.
Posteriormente se preparó para certificarse como profesor, papel que desempeñó por 62 años hasta que en 2023 se jubiló en el Cobach Navojoa, donde estuvo por más de 20 años frente al aula.
PRIMER MUSEO: HU TEZZO
En 1996, el profesor Lombardo construyó el primer museo de Navojoa en el patio de su casa, el cual nombró Hu Tezzo, que significa ‘la cueva’, traducido del ópata.
La necesidad de tener un museo en la Perla del Mayo nació luego de varias investigaciones donde Lombardo, junto a un grupo de investigadores, recabaron material que tenían en restauración, pero no había un sitio para exponerlo, únicamente un centro cultural.
“No teníamos un lugar y mi esposa me dijo que lo hiciera en el solar… y así empezamos”, comentó el profesor, y el 21 de febrero de 1997 se inauguró este espacio didáctico.
¿De dónde viene la afición del profesor Lombardo por las cuevas?
El papá del profesor se dedicaba al comercio en la sierra alta de Sonora y, en ocasiones, Lombardo lo acompañaba. Recuerda que, en ese momento, tenían que refugiarse de la lluvia en algunas cuevas, donde observó por primera vez las pinturas rupestres.
“Mi papá era comerciante de la sierra alta de Sonora, y a veces me iba con él y nos metimos a las cuevas y veía pinturas, le preguntaba a mi papá que significaban y me decía que ‘si las piedras hablaran, nos contarían la historia del pueblo que las hizo’. Ahí empezó mi primera inspiración por el arte rupestre, eso nunca se me olvidó”, compartió Lombardo en entrevista.
MUSEO REGIONAL DEL MAYO “LOMBARDO RÍOS RAMÍREZ”
Mientras continuaba con su labor docente, también lo hizo con sus investigaciones de paleontología, etnografía y arqueología.
Pocos años después encontraron la antigua estación del ferrocarril del Río Mayo frente a la plaza Santa Fe, misma que adquirieron con el apoyo de los gobiernos municipal y estatal, para hacer el Museo Regional del Mayo.
El 12 de julio de 2002 se inauguró el segundo museo de Navojoa, que de momento se encuentra cerrado al público por remodelaciones, puesto que el edificio fue construido hace 101 años y necesita diversas reparaciones.
ECO MUSEO DE TEHUELIBAMPO
En 1981, se reencontró un yacimiento arqueológico, ubicado a 33 kilómetros al noreste de Navojoa, a un costado del Río Mayo, donde se han encontrado 107 petrograbados de los proto Mayos, y 22 años después del hallazgo se fundó el tercer museo de la ciudad.
“Nuestros antepasados proto Mayos dejaron evidencia de su relación con el universo, con el mundo, con la vida… fue un un encuentro maravilloso que me llenó de entusiasmo y por el gran contenido simbólico que tiene y por el mismo lugar tanto geológico como arqueológico que tiene ese espacio”, expresó Ríos Ramírez.
Así inició el proyecto Agua Azul Eco Museo de Sitio Tehuelibampo, considerado como un espacio consagrado por la civilización proto Mayo hace más de 2 mil 500 años, que exalta la importancia del elemento agua como elemento de vida.
“Se me han acabado los ojos, la movilidad, pero no se me ha acabado la voz, entonces seguiré haciendo lo que pueda con lo que queda, me siento bendecido, favorecido, pleno con lo que la vida me ha dado… agradecido con la gran región del mayo”, finalizó en la entrevista el maestro y aseguró que aún hay proyectos pendientes para los tres museos que fundó en Navojoa, Sonora.