Ciudad de México, 12 de octubre (SinEmbargo).- Una Comisión de la Cámara de Diputados aprobó este miércoles la reforma constitucional que extiende la presencia del Ejército en las calles hasta 2028.
La votación se efectuó en la Comisión de Puntos Constitucionales, en donde hubo 28 votos a favor y 10 en contra de la iniciativa que ha desatado polémica en el país ante las advertencias que se han lanzado por una posible militarización.
Luego de esta aprobación, se espera que el mismo día de hoy se discuta la modificación al Artículo Quinto Transitorio de la Constitución, con el objetivo de permitir la presencia de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad pública.
La redacción de la iniciativa “suena muy bonito, pero la realidad es que el Ejército no tiene capacitación”, sentenció el Diputado Santiago Torreblanca, del Partido Acción Nacional (PAN).
Asimismo, el Diputado de Movimiento Ciudadano (MC), Salvador Caro, calificó a la reforma constitucional como una “simulación y producto de acuerdos políticos para la impunidad”.
Por otro lado, Aleida Alavez Ruiz, de Morena, señaló que la iniciativa “es muestra de la capacidad de diálogo y de la apertura de Morena” con aceptar propuestas originadas desde integrantes del bloque opositor.
El pasado 5 de octubre, la Cámara de Diputados recibió la propuesta de reforma constitucional para extender la permanencia de las Fuerzas Armadas en las calles hasta 2028, después de que ésta fuera devuelta por el Senado de la República.
“Celebramos la aprobación en el Senado de la República de la reforma que extiende el plazo de las fuerzas armadas en labores de seguridad. Las y los diputados de Morena estamos listos para analizar y dar trámite a la minuta. Lo importante es garantizar la seguridad de todas las familias”, dijo Ignacio Mier Velazco, Coordinador del Grupo Parlamentario de Morena.
El pasado 4 de octubre, el Senado aprobó la reforma constitucional que amplía la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles como apoyo en la seguridad pública hasta 2028.
Con 87 votos a favor, 40 en contra y ninguna abstención, la reforma pasó gracias al voto calificado, que de un total de 127 senadores era de un mínimo de 85, es decir, apenas dos por encima de los necesarios. Al ser una reforma de un sólo apartado, la aprobación en lo general y en lo particular se realizó en una sola votación.
Para avalar el cambio, Morena echó mano de una parte de legisladores opositores, incluido Miguel Ángel Mancera, del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y varios del Partido Revolucionario Institucional (PRI), como Jorge Carlos Ramírez Marín y Sylvana Beltrones.
