Por: Alejandro González
Ataques con misiles rusos mataron al menos a 25 ucranianos el jueves mientras las víctimas esperaban para entregar ayuda y recoger a familiares de un área anexada por el presidente ruso, Vladimir Putin, en violación al derecho internacional.
En Avtorynok, un mercado de autos antiguos en la franja sur de Zaporizhzhia, un grupo de civiles había esperado toda la noche para cruzar al territorio controlado por Rusia.
La región más amplia de Zaporizhzhia es una de las cuatro donde Rusia orquestó referéndums en un intento de legitimar la anexión, pero solo una parte de la región está bajo control militar ruso.
En entrevistas con reporteros del Washington Post el jueves, los civiles describieron el motivo de su viaje.
Algunos eran médicos que cruzaban las líneas de batalla para realizar cirugías que salvan vidas en hospitales que las fuerzas rusas no han podido reabastecer adecuadamente.
Otros eran civiles comunes que intentaban rescatar a sus seres queridos que eran demasiado ancianos o estaban demasiado enfermos para hacer el viaje ellos mismos.
“¿Qué opción tengo? Es mi pariente”, dijo un hombre, Serhiy, mientras esperaba para unirse al convoy, y pidió que no se usara su apellido por temor a su seguridad.
Serhiy dijo que entendía el peligro pero que no veía otra opción.
Muchos residentes del territorio ucraniano ocupado que permanecieron en sus casas después de que las fuerzas rusas invadieran y tomaran el control finalmente decidieron huir en los últimos días, tras el anuncio de Putin de sus planes de anexión.
La madrugada del viernes, mientras el convoy esperaba para partir, tres misiles se estrellaron contra el suelo alrededor de los vehículos, dijeron testigos presenciales en el lugar.
No estaba claro de quién eran los cuerpos yacían bajo las mantas y lonas que las fuerzas de seguridad y los médicos reunidos usaban para envolver a los muertos.
Algunas de las víctimas cayeron al lado de sus autos o en los arbustos donde habían buscado seguridad.
Horas después del ataque, varios sobrevivientes conmocionados aún estaban allí y perdidos. Cuando uno recibió una llamada telefónica, respondió y simplemente dijo: “Estoy aquí. Estoy vivo”, y luego colgó.
Violando el derecho internacional, Putin firmará la anexión de las regiones ucranianas
Al menos 25 personas murieron en los ataques, dijeron las autoridades.
En los hospitales locales, los cirujanos en los quirófanos luchaban para salvar las vidas y las extremidades de al menos otras 15 víctimas del ataque con misiles.
Funcionarios ucranianos dijeron que los misiles parecían haber sido disparados desde un sistema tierra-aire S-300.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, acusó en los últimos días a Rusia de disparar misiles contra infraestructura civil y otros objetivos no militares. Zelensky denunció los ataques de mayor alcance como un acto de cobardía tras la desordenada retirada de los soldados rusos de la región nororiental de Járkov.
Información de La Opinión
