La presa Rodolfo Félix Valdés, conocida como “El Molinito”, se construyó en 1991, para evitar derrames de la presa Abelardo L. Rodríguez (ALR) en Hermosillo, ciudad que desde su fundación en 1700 como Hacienda del Pitic, ha dependido del río Sonora para su abastecimiento.
En años recientes, ambos represos se mantuvieron con un nivel de captación muy bajo. Tan solo en el año 2021, la presa Abelardo L. Rodríguez mantuvo el 0% de su capacidad total y El Molinito al 13%.
En contraste, este año se observa un aumento de captación favorecido por las lluvias del monzón mexicano, pues al 31 de julio El Molinito contaba con el 16% de su capacidad y aumentó al 57% en el lapso de 22 días, que representa 69.113 hm3.
Este incremento también se observó en la presa ALR, pues su almacenamiento aumentó del 0.3% al 14.8% en el mismo lapso.
¿Por qué no trasvasan agua de El Molinito para abastecer la presa ALR?
Según información de un artículo escrito por Rolando Díaz Caravantes y Ernesto Camou, publicado por el Colegio de Sonora (Colson), institución que tiene todos los derechos reservados, registraron que El Molinito fue construido para prevenir inundaciones en Hermosillo.
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Los anteriores gobiernos de Sonora apoyaron la construcción de la presa ALR, para responder a la demanda creciente de la población de Hermosillo.
Sin embargo, en 1979, 1983 y 1985 la presa captó demasías de agua provenientes del Río Sonora que provocaron inundaciones en algunas colonias periféricas de la ciudad, y en los campos agrícolas de la costa.
“Una cantidad considerable de sedimentos en el vaso que disminuía progresivamente su capacidad útil, incidiendo desfavorablemente en el aprovechamiento de las aguas del río y propiciando que en el corto plazo existiera una mayor frecuencia de derrames de excedencias”, mencionó Maribel Pallanaez en su artículo ‘Valoración económica de los servicios ambientales sustentados por la presa Abelardo L. Rodríguez’ en el año 2002 publicado por Colson.
Para prevenir futuros desbordes se elaboró el “Programa Especial de Hermosillo” en 1989, con el fin de garantizar seguridad a la ciudad mediante un sistema hidráulico que controlara las avenidas del río Sonora.
En dicho programa se determinó que la presa El Molinito serviría para controlar las crecientes del río, y así evitar más derramamientos de la presa ALR.
“Esta presa se construyó recientemente y está destinada exclusivamente al control de avenidas, esto significa que no debe almacenar agua a lo largo del tiempo. Cuando se presenta una avenida la presa El Molinito la regula conforme ingresa al vaso de almacenamiento, y la descarga a través del vertedor de demasías. El agua remanente en el vaso debe ser desalojada también, previendo la ocurrencia de avenidas subsecuentes”, especificó Nicolás Pineda en 1998.
Es así, que la presa El Molinito cumple con dos funciones: evitar inundaciones en Hermosillo, y recargar el acuífero que posteriormente abastecerá a la ciudad en épocas de escasez de agua en el río Sonora. Por lo anterior, los ejidatarios del Molino de Camou no pueden disponer del agua para sus actividades, porque ésta se utiliza para los habitantes de Hermosillo.
*Los datos históricos de esta publicación fueron retomados de un artículo de Rolando Díaz Caravantes y Ernesto Camou, publicado en 2005 por el Colegio de Sonora, institución que tiene todos los derechos reservados*.