Hermosillo, Sonora.- “Lo primero que se me vino a la mente es salvaguardar la vida del bebé, ósea inmediatamente trasladarlo a la clínica, ya que no había unidades de Cruz Roja en ese momento disponibles”, compartió la Denisse Del Sol Saavedra, una de las oficiales que rescato a un bebé de 4 meses quien no podía respirar.
Los hechos se registraron en la colonia Tierra Nueva, a las 9:10 horas de la mañana en Hermosillo.
La policía, Amor Denisse, advirtió que primero se deben verificar los signos vitales de la persona en peligro, tras comprobar el pulso y vías respiratorias, posteriormente se tiene que trasladar, según la urgencia.
La oficial Del Sol comentó que durante el traslado del bebé, a la patrulla se le ponchó una llanta en las calles Cuevas y Lagunas Ponientes.
Tras esto, los agentes de la unidad 238, los policías Carlos Mario Gastélum Lugo y Alejandra Sarahí Santillano Portillo se acercaron en apoyo e hicieron contacto de inmediato con la unidad 237.
Al llegar la unidad 238, la oficial Del Sol Saavedra quien seguía dándole los primeros auxilios al bebé, cambió al otro vehículo, pero una de las llantas de esa patrulla perdió aire al circular por un camino llenó de baches de las calles Cuevas y Carlos B. Maldonado.
Enseguida, la unidad 058 se acercó en apoyo, abordada por los agentes Mauricio Básaca Saavedra y Maricela Olguín González, quienes subieron a la oficial Denisse Del Sol y a la abuela del menor.
Los agentes solicitaron por radio la ubicación de la ambulancia que se dirigía al lugar del reporte por el bulevar José Alberto Healy, encontrando la patrulla donde hicieron entrega del menor ya respirando.
“Como equipo es unirnos y como en este caso llegar al lugar para cualquier ayuda que se pueda dar, como en este caso que se nos pusieron algunas trabas, pero pues se logró la coordinación en equipo para poder llegar a la Cruz Roja para que atendieran al bebé”, comentó.
Por su parte, Mauricio Básaca Saavedra, mencionó que lo principal en estas situaciones, cuando la vida de una persona está en riesgo, es trabajar con lo que hay a la mano.
“Los instrumentos en esta ocasión, pues sufrimos de desperfectos de los neumáticos, y gracias a la coordinación del equipo de trabajo se logró poner al bebé a salvo”, añadió.
La abuela y el pequeño fueron llevados por los socorristas de la unidad 544 de Cruz Roja a un hospital, donde se valoraría la salud del pequeño.
La policía Del Sol Saavedra agregó que ya tuvo experiencias similares, donde puso en práctica las habilidades adquiridas durante su formación como agente, pero no fueron tan relevantes como esta.
“Ahí uno como oficial, ya teniendo al bebé en nuestras manos ya es una gran responsabilidad, entonces, lo primero que hay que hacer es salvaguardar la vida del bebé, o sea, hacer todo lo que esté en nuestras manos para poder salvar una vida, ya se la de este menor u otra persona”, culminó.