El próximo gabinete que se estrenará el 13 de septiembre se requerirán servidores públicos preferentemente con conocimientos y experiencia que compartan la filosofía de la 4T, lo que presenta retos importantes para mantener en el corto plazo la continuidad en la operación del sector público y sus organismos descentralizados. Asimismo, será de suma importancia el tratamiento que se le dé a los funcionarios de carrera que son la parte operativa, que conoce el marco legal y la forma de instrumentar las políticas. Necesariamente se tendrá que construir sobre las capacidades de los funcionarios públicos de carrera y el tipo de relación que se establezca con ellos determinará en gran medida una operación sin sobresaltos.
Lo anterior lo pongo a discusión, porque en cualquier cambio de administración existe una curva de aprendizaje para los nuevos actores en lo referido a la asimilación de que la responsabilidad pública se rige por mandato y su actuación está acotada, que hay leyes que limitan la actuación más allá de la iniciativa del secretario en turno, que hay compromisos y acuerdos federados que se tienen que cumplir, procesos de compras por la ley de adquisiciones, además de la ley de responsabilidades de los servidores públicos que les pone límites en su actuación y los sanciona.
¿Podrá el gabinete del gobernador electo poner en marcha el proyecto de un Sonora de liderazgo que ha prometido?
En términos generales las y los profesionales que ha designado hasta ahora el gobernador electo para cumplir con la encomienda de entrega recepción, si bien no han estado en la arena del servicio público en niveles de liderazgo -salvo algunas excepciones- lo cierto es que la mayoría tiene un nivel de conocimiento importante en las disciplinas requeridas para su potencial encargo.
De acuerdo a declaraciones del Dr. Durazo para la selección y posteriores nombramientos del próximo gabinete se está haciendo un gran esfuerzo en invitar a “talentos” que saben y dominan los temas de cada cartera. Sin embargo, es necesario para el óptimo funcionamiento de su gabinete que los miembros considerados respondan a los siguientes aspectos:
1.- Equipo apto y apropiado. Es fundamental que individualmente cada uno de los miembros de su gabinete sea apto para llevar a cabo las funciones que va a desempeñar, lo que implica tanto conocimiento del tema o disciplina como capacidad de llevar a cabo el encargo. De igual manera, es crucial que cada miembro sea apropiado en el sentido de que no tenga conflictos de interés para desempeñar su cargo ahora de autoridad. En este tema es siempre mejor prevenir que lamentar. Igualmente, lo apropiado puede visualizarse desde el contexto de equipo pues es necesario evitar posiciones antagónicas entre dependencias que deben trabajar en forma coordinada. Esto es clave para obtener, de entrada, credibilidad y ganar momento al arranque de la gestión.
2.- Capacidad de liderazgo y gestión. Conocer de un tema, ser especialista o dominar una disciplina es condición necesaria pero no suficiente para dirigir exitosamente una secretaría. Saber es sólo una parte de lo que se requiere y no necesariamente es las más importante. La clave o uno de los criterios que deberá contemplar el gobernador electo es, la capacidad de generar resultados dado a que es la prioridad por lo cual se les invita a formar parte del gabinete estatal.
Reitero la necesidad de priorizar el criterio de selección de funcionarios de alto nivel, como en cualquier empresa competitiva es evaluar las capacidades como liderazgo, con enfoque hacia resultados, trabajo en equipo, para comunicar, administrar y generar acuerdos las que resultan cruciales para llevar a buen puerto el encargo.
Restricciones de recursos financieros. La diferencia entre lo deseable y lo posible está siempre acotada por la restricción presupuestal. En este sentido, en el corto plazo es difícil allegarse de mayores recursos para dar un mayor impulso a la inversión pública considerando los niveles de endeudamiento actuales y el apoyo de la inversión privada como pilar de la inversión total. Gastar mejor como lo ha dicho es una alternativa y sortear esto a nivel de cada dependencia mediante ahorros sin dejar de atender los compromisos adquiridos ni desviarse de su misión es un reto para el gabinete del nuevo gobierno.
Finalmente, considero que siempre el cambio trae consigo una posibilidad y con estas vienen nuevas oportunidades. En la medida que el próximo gabinete esté mejor preparado con base en las consideraciones mencionadas anteriormente tendrá mejor capacidad de gestión y posibilidad de generar resultados. La tarea no es fácil y requerirá de un gran nivel de claridad e interlocución para llevar a buen puerto de los cambios prometidos.
Sergio Oliver Burruel
Académico UNISON, Presidente de la Asociación sonorense de psicología aplicada (ASPA)