Un grupo de organizaciones ecologistas que incluye a Greenpeace y a Amigos de la Tierra ha pedido a la Comisión Europea (CE) que recomiende comer “menos y mejor carne, leche y huevos”, en la estrategia que Bruselas en favor de una agricultura y una pesca más sostenibles.
“Nos alarma que una cuestión clave esté ausente en las comunicaciones de la Comisión sobre la estrategia ‘De la Granja a la Mesa’: la insostenibilidad de una buena parte de los actuales sistemas europeos de cría de animales y la sobreproducción de carne, lácteos y huevos”, dicen los ecologistas en una carta enviada a Bruselas.
Para estas organizaciones, disminuir el consumo y una mejor producción de la carne “pone en riesgo la credibilidad y viabilidad” de la estrategia destinada a hacer los alimentos europeos “un estándar global de sostenibilidad”.
La carta está enfocada en los datos científicos para denunciar el impacto de la producción animal industrial sobre el medio ambiente, la salud humana, el bienestar animal y las comunidades rurales.
En contraste con el modelo industrial, las organizaciones ecologistas abogan por “los sistemas alimentarios y agrícolas sostenibles (…) que también tienen un mayor potencial para el bienestar animal”.
La agricultura sostenible, atraviesa dificultades económicas y necesita apoyo, frente a “algunas corporaciones internacionales” que consolidan el control sobre los precios y la producción de la carne.
“Dada la urgencia de la crisis climática y ecológica y las crecientes preocupaciones de salud, los cambios en nuestro sistema alimentario no pueden dejarse solo a elección del consumidor”, señalan los firmantes.
La carta, apoyada por una veintena de organizaciones, está dirigida al vicepresidente comunitario Frans Timmermans y a los comisarios europeos de Sanidad, Stella Kyriakides, Agricultura, Janusz Wojciechowski y Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius.