Olivia Yacé, Miss Costa de Marfil 2025, anunció su renuncia al título para mantenerse fiel a sus valores y principios. La joven comunicó su decisión a través de redes sociales, donde explicó que su determinación responde a sus convicciones éticas. Sin embargo, su dimisión ha sido relacionada en redes con la polémica coronación de Fátima Bosch como Miss Universo 2025, señalada por presunto fraude vinculado al presidente del certamen.
En su mensaje, Yacé recordó su participación en el concurso celebrado en Bangkok. “Como representante de Costa de Marfil en el concurso Miss Universo 2025, en Bangkok, fui testigo directo de mi capacidad para lograr grandes cosas a pesar de la adversidad”, expresó.
Más adelante, explicó que su decisión busca preservar sus ideales y evitar actuar de forma contradictoria con ellos. “Pero para continuar por este camino, debo mantenerme fiel a mis valores: respeto, dignidad, excelencia e igualdad de oportunidades, los pilares más sólidos que me guían”, afirmó.
La marfileña señaló que su renuncia implica su retiro definitivo de cualquier actividad o programa afiliado al Comité de Miss Universo. “(…) Para alcanzar mi máximo potencial, debo mantenerme firmemente arraigada en mis valores, principios rectores que allanan el camino hacia la excelencia; alejarme de este rol me permitirá dedicarme por completo a defender los valores que valoro”, añadió.
Su negativa a colaborar nuevamente con la organización, dirigida por Raúl Rocha Cantú, ha sido interpretada en redes como una postura de desacuerdo con el título de Bosch, cuya coronación ha sido objeto de crecientes cuestionamientos públicos.
La controversia fue impulsada por Omar Harfouch, exjuez de Miss Universo, quien habría renunciado tras detectar el presunto fraude. Harfouch sostiene que Rocha Cantú intervino para favorecer la elección de Bosch, debido a que una de sus empresas recibió un contrato millonario de Petróleos Mexicanos (Pemex), donde el padre de la ganadora, Bernardo Bosch Hernández, ocupa un puesto estratégico.
Otra renuncia reciente es la de Brigitta Schaback, delegada de Estonia. No obstante, en su caso no hizo referencia a la corona de Bosch, sino a diferencias con la directora de Miss Universo en su país, Natalie Korneitchik.



