Por Ana Gamboa y Daniela Ballesteros
Hermosillo, Sonora.- Héctor Contreras, abogado y colaborador de Proyecto Puente, fue detenido el pasado viernes 14 de noviembre por policías municipales en Nogales, Sonora, mientras se encontraba en la línea para ingresar a Estados Unidos.
El motivo de la detención fue, según se informó en el Informe Policial Homologado, por el reporte de otra ciudadana que acusó a su acompañante, la conductora del vehículo, de “meterse en la fila”, es decir, por una falta administrativa.

Sin embargo, Héctor fue bajado de su auto, detenido, esposado y trasladado a las instalaciones del Centro de Atención Temprana de Nogales y permaneció en calidad de arrestado, hasta que se realizó una audiencia el sábado a 8:00 de la mañana.
La jueza a cargo, Giancarla Ramírez Félix, después de escuchar los hechos, consideró como un abuso de autoridad el actuar de los policías municipales y cuestionó la intensidad con la que abordaron al ciudadano; “es ilícita la detención” enfatizó durante la resolución.
Ramírez Félix explicó que toda persona puede ser detenida, es decir abordada, si se considera que está cometiendo un hecho con apariencia de delito. Sin embargo, dijo que en este caso la sanción era aplicar una multa, no un arresto.
Le atribuyen a Héctor una actitud altanera o grosera, pero la restricción de la libertad de una persona solo puede tener lugar cuando los policías por las circunstancia del hecho pueden considerar que se está cometiendo una conducta delictiva. En este caso se trata de una falta administrativa.

Recordó además que tesis de la Primera Sala de la Suprema Corte establecen parámetros y niveles de intensidad con la que la autoridad va abordar a los ciudadanos para evitar detenciones arbitrarias, y que los policías deben tener la capacidad de abordar la situación de una manera profesional.
Aunque sí reconoció que el ciudadano Héctor Contreras mostró una actitud grosera hacia los elementos, dijo, sin justificar, que es de naturaleza humana reaccionar de esa manera ante una detención.
La jueza calificó de “un circo del municipio” lo ocurrido, por el abordaje intenso, la forma excesivamente amable en la que está redactado el Informe Policial Homologado y el proceder de los elementos, e incluso aprovechó la situación para mencionar que los ciudadanos, por este tipo de casos, no confían en los funcionarios públicos.
También sugirió notificar al director de la Policía Municipal de Nogales acerca de los posibles actos de abuso de autoridad por parte de los elementos que detuvieron a Héctor Contreras, señalando que en otros casos ha advertido irregularidades similares.

Pero el actuar de la Policía Municipal de Nogales no fue lo único que se expuso en esta audiencia, y es que la jueza tomó esta oportunidad para mencionar otras acciones contra su persona y sobre acciones del Ministerio Público.
En un momento determinado, uno de los agentes del MP indicó que quería la copia en audio y video de la audiencia para mandarla al Tribunal de Disciplina y la Fiscalía Anticorrupción (FAS), como una advertencia a la jueza.
“Me encanta la postura de la Fiscalía, ahora no hay libertad de jurisdicción, ya te van a integrar un delito por aplicar tu criterio. Es tanta la pasión por la carrera judicial que desde ahorita me les adelanté, vista para su superior jerárquico y todo. ¿A la FAS? Mejor pásenme a otra fiscalía, porque todos los asuntos (a la Fiscalía Anticorrupción de Sonora) se les caen”, respondió.
Asimismo, indicó que enviaría copia del material a la FAS, para evidenciar lo sucedido: “Aquí la comisión flagrante de un delito por parte de esta autoridad”, comentó.
Más adelante, Ramírez Félix llamó la atención a otro de los agentes, ya que al momento de dar su resolución al caso de Héctor Contreras, el funcionario hizo gestos y expresiones, entre risas, que la jueza consideró una falta de respeto.
Recordó que ya había advertido al agente sobre su comportamiento en una audiencia anterior, por lo que ordenó hacer efectiva la multa de 20 UMAs de la cual le había advertido en ese momento.
“Uno sabe que se expone, que se puede equivocar en determinaciones y no caerle bien a la gente. Antes decía —que no había elecciones—, ‘no vengo a caerles bien’, pero ahora se supone que tienes que caer bien. Entonces, fiscal, ¿puede usted facilitar su vida? Pídales que no lo ingresen a las audiencias que presido”, expuso.
Agregó que, al acudir a una audiencia, el funcionario participa como una parte procesal y no como autoridad, por lo que deben conducirse con respeto: “No me interesa la opinión que tenga de mi persona, sino por la investidura que representa el órgano jurisdiccional”, afirmó.
Pienso firmemente que, para aspirar como ciudadanos a tener un sistema de justicia mejor, se tienen que hacer ese tipo de pronunciamientos y no tratar de simular lo ilegal como si fuera legal.
La juzgadora expuso que las decisiones judiciales no deben verse afectadas por temores sobre posibles acciones de la Fiscalía.
“¿Libertad de jurisdicción habrá o ahora cada vez que decida tengo que tener miedo de si me van a querer tener ahí en calidad de imputada si me van a librar una orden?”, cuestionó.
AUDIENCIA COMPLETA



